La decisión de Haití de multar a los ciudadanos que introduzcan ilegalmente mercancías de contrabando procedentes de la República Dominicana se inscribe en el marco de su soberanía.
Por muy dura que sea la vida de la población, no se puede impedir a las autoridades que regulen el comercio que entra y sale del país.
Prueba Globo.
Se impone una sanción de multa de hasta 500.000 gourdes (aproximadamente 215.000 pesos dominicanos) a quienes introduzcan ilegalmente mercancías de contrabando desde la República Dominicana.
No está claro si esta medida se extiende a las mercancías introducidas desde otros países. Los bienes incautados se eliminan, distribuyen y venden al público.
Aunque el objetivo parece ser castigar el contrabando, en medio de la crisis actual, la medida se presta a diferentes interpretaciones.
Una de ellas es que el Gobierno haitiano está obstaculizando el comercio y el restablecimiento de buenas relaciones con la República Dominicana.
Mientras la parte haitiana no intente encontrar una salida a la crisis provocada por la construcción del desvío del río Masacre, las autoridades dominicanas tendrán que esperar a ver cómo evolucionan las cosas.
