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Jugaron en Ridom como estrellas de las Grandes Ligas

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José Ramírez debuta en Leones del Escogido y se une a un talentoso grupo de estrellas de las Grandes Ligas. José Ramírez debutó anoche con los Leones del Escogido e inmediatamente se unió al g.

José Ramírez debuta en Leones del Escogido y se une a un talentoso grupo de estrellas de las Grandes Ligas.

José Ramírez debutó anoche con los Leones del Escogido e inmediatamente se unió al grupo de jugadores dominicanos en el béisbol invernal, disfrutando de un estatus de primera en las Grandes Ligas, tanto ofensivamente como en términos de contratos.

Ramírez, registrado como el tercer jardinero de los Leones, era un novato cuando jugó por última vez para los Toros en 2015-16, bateando apenas .219 para los entonces Indios de Cleveland.

Pero, tras agotar apenas 50 entradas también con los romanenses, su explosión en Grandes Ligas comenzó en Cleveland, donde puso un sólido promedio de bateo de .312 (565-176) con 46 dobles, 11 jonrones y 76 empujadas.

Esa producción, de acuerdo a lo que él describió acertadamente como la distancia de traslado de Baní a La Romana, lo hizo desaparecer del escenario dominicano hasta su debut con los escarlatas, también en las Grandes Ligas, a finales de septiembre, luego de las negociaciones que se produjeron anoche por Vladimir Guerrero Jr.

Sus cinco apariciones en el Juego de Estrellas, cuatro bates de plata, unido a un contrato que le permitirá ganar 105 millones de dólares en las próximas cinco temporadas y estar en los primeros seis lugares de la batalla por el más valioso de América entre 2017 y 22, hacen de José Ramírez una marca especial en el béisbol dominicano Convirtiéndolo en un jugador con.

Desde su entrada al Quisqueya Juan Marichal en su primer turno al bate anoche, el señor Rapala, quien ha bateado .282 con 36 hits, 24 jonrones, 80 carreras anotadas y 14 millones de dólares en Cleveland este año, se ha unido a sus compatriotas que han jugado en este país en el pináculo de sus carreras en las grandes ligas.

Vladi y Soriano.

Un par de casos rápidos, al menos de las últimas temporadas de jugadores brillantes, son las de 2001-2002, cuando Vladimir Guerrero y Alfonso Soriano vistieron la camiseta de las Estrellas.

Guerrero tuvo un récord de 29-9 con los Elefantes después de sus ya habituales 34 hits, 107 bambinazos y .307 con los entonces Expos.

Soriano, por su parte, aportó 18 jonrones, 41 carreras y un promedio de bateo de .268 (574 de 134) a su breve carrera en el béisbol invernal.

Tejada lideró todo el camino.

Estuvo representado por Miguel Tejada, que siempre jugó en la pelota invernal, a pesar de haber disputado al menos 160 partidos en las mayores. La Guagua, que lo hizo siete veces, superó ese número de juegos y superó las 600 entradas en diez ocasiones.

Aunque el llamado ‘pelotero de la patria’ estuvo menos presente, Robinson Canó registró 10 temporadas con el uniforme de las Estrellas, al menos en la serie regular. Bartolo Colón fue otro que lanzó para las Águilas en la cúspide de su carrera.

Marcell Ozuna vistió el uniforme de los Gigantes en 2021 y 2022.

En otros casos, Albert Puhols, quien ya había llegado al final de su carrera en la marca de Cooperstown, vistió la camiseta del Escogido en 2021-22, con récord de .246 (61-15).

En su lado del campo, este año y unos días antes, Nelson Cruz alcanzó su cuota de juegos jugados en cada estadio. Cruz bateó la cifra más alta de su carrera, 464 jonrones, e impulsó 1.325 carreras, mientras que Manny Ramírez, que jugó para las Águilas en 2012-13, bateó un jonrón en su primer turno al bate y alcanzó .293 con cuatro jonrones.

Ramírez, quien se ganó un boleto y anotó una carrera en su primer turno al bate en Melénudo, se une a una lista de dominicanos que han jugado en el país con un récord estelar en las Grandes Ligas.

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