Jerusalén — El ministro de Defensa israelí, Yoav Galant, dijo el miércoles que Israel no detendrá su ofensiva militar dentro de la Franja de Gaza hasta que cumpla dos tareas: destruir a Hamás y devolver los rehenes a sus familias. Dijo.
¿Quedarse o irse dentro de Gaza?
El Ministro Gallant informó al Coordinador sobre el despliegue operativo de las fuerzas israelíes a medida que avanzan hacia Gaza y atacan la infraestructura terrorista de Hamás. Discutieron las complejidades de una operación de este tipo, ya que Hamás tiene raíces en zonas urbanas y utiliza cínicamente instalaciones civiles, entre ellas varios hospitales, según un comunicado del Ministerio de Defensa sobre la reunión.
Gallant y McGurk también hablaron largo y tendido sobre la situación de los rehenes, compartiendo información y detalles sobre la situación de los prisioneros, incluidos israelíes y estadounidenses, y los esfuerzos para traerlos de vuelta a casa.
El portavoz de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, declaró ayer que Estados Unidos dispone de información de inteligencia según la cual Hamás y la Yihad Islámica Palestina están utilizando varios hospitales de la Franja, entre ellos el de Al Shifa, y sus túneles subterráneos para operaciones militares, ocultando rehenes y armas.
Horas después, las fuerzas israelíes confirmaron que habían entrado en los hospitales a primera hora de la mañana para realizar una redada localizada tras cinco días de asedio.
Según el comunicado de Defensa, las partes también debatieron los retos que plantea facilitar los esfuerzos humanitarios y la ayuda humanitaria a la población civil, así como el papel de la comunidad internacional a la hora de permitir una mayor entrega de suministros de emergencia.
