Las muertes y los millonarios daños materiales causados por las lluvias torrenciales caídas el sábado en Santo Domingo y otras zonas han conmocionado a la nación.
Sólo los nueve muertos por el derrumbe de un muro que aplastó varios automóviles en la carretera 27 de Febrero y la vía Máximo Gómez han causado profundo dolor entre la población.
Significa que, independientemente de la magnitud de las precipitaciones, las estructuras podrían haberse derrumbado con tan trágicas consecuencias.
Se ha confirmado la muerte de nueve personas tras el derrumbe del muro lateral de un viaducto.
Las lluvias torrenciales también afectaron a los estados de San José de Ocoa, Sánchez Ramírez, Azua y Barahona, provocando no sólo muertos sino también comunidades aisladas por las inundaciones.
La crecida de ríos y quebradas es un fenómeno recurrente después de cada lluvia fuerte, pero lamentablemente, la gente en su mayoría ignora los llamados a evacuación.
Nota: El COE confirma 21 muertes debido a las lluvias del sábado.
Sin embargo, la realidad es que no hay un momento que perder. Sin embargo, como en cualquier otro momento, las muertes y los daños causados por las inundaciones son una experiencia a tener en cuenta.
