— La Comisión de Orden traslada la inversión de la localidad de Pescuesa (Congreso PSOE) a la de Trehoncillo (Congreso PP)
Vecinos de la localidad cacereña de Pescuesa, encabezados por su alcaldesa, Agustina Fernández, expresaron este martes su indignación y tristeza por la decisión de la Junta de Extremadura de construir en Trehoncillo un centro de convalecencia que iba a ser levantado en este pueblo de 164 habitantes.
La protesta, bajo el lema La rebelión de Pescueza contra las injusticias, tuvo lugar en la plaza central de la localidad, donde los vecinos se concentraron y exhibieron carteles en los que pedían la retirada de la decisión.
En su discurso, el alcalde dijo: «Los habitantes de Pescuesa y mis vecinos se sienten muy injustamente tratados.
Llevamos años trabajando en un nuevo modelo de atención que preste servicios de calidad a los mayores y sirva de referencia para muchos. Pero la Junta de Extremadura, presidida por María Guardiola, no quiere ni saber nada de Pescuesa y nos está haciendo un daño irreparable».
La alcaldesa Agustina Fernández subrayó que «hoy más que nunca estoy dispuesta a luchar por el barrio, por sus derechos, por la supervivencia de Pescuesa y por sus servicios».
Nunca antes había ocurrido que se quitaran servicios a otro pueblo para potenciar los de uno. Ya está aprobado, se han dado todos los pasos que había que dar y se ha presentado toda la documentación solicitada’, lamentó.
Fernández recalcó que los vecinos de Pescuesa no están atacando los servicios ni a los vecinos de otros pueblos, sólo quieren lo que es suyo, y siempre somos respetuosos porque todos tenemos derechos.
Según la Sra. Pescuesa, la decisión de trasladar el Centro de Referencia Comarcal de Atención a Personas Mayores al Trehoncillo (Parlamento del PP) es una decisión de castigo a un pueblo que ha demostrado a lo largo de los años que puede marcar la diferencia en la vida de los pequeños municipios trabajando juntos como comunidad para atender a las personas mayores y a sus dependientes Es una decisión política y partidista.
No decir nada al ayuntamiento es una vergüenza y una falta de respeto a la organización.
El motivo del cambio es que no hay suelo urbano y se pueden perder 38 millones de euros. El pueblo de Pescueza no acepta mentiras.
Pescueza envió toda la documentación necesaria, pero no recibió respuesta. Fue un silencio para colaborar con otro pueblo con un gobierno ideológicamente relevante.
El artículo 69.6 de la Ley 11/2018, de 21 de diciembre, de Ordenación Territorial y Urbanística Sostenible de Extremadura establece que en los actos promovidos por las administraciones públicas (y esta) la aprobación de los proyectos de obras y servicios públicos llevan implícita la calificación rústica de los terrenos a los que afecten … Por tanto, se entiende que la aprobación de un proyecto para la construcción de un centro de convalecencia habilita para la edificación de los terrenos.
Es un error decir que se van a perder 38 millones de euros, y que lo que no se ejecutó en Pescuesa se perderá igualmente, no en otros pueblos.
¿Por qué Trehoncillo y no Moraleja? Porque no tiene nada que ver la política hortera, la política sectaria y las necesidades reales.
Pescuesa habla para decir, como le gusta decir a la señora Guardiola, que su decisión es una decisión política y partidista, un castigo para un pueblo donde el ayuntamiento está controlado por un partido que no es el suyo, dijo en otro momento la esposa del alcalde, Agustina Fernández.
