Los descuentos del Viernes Negro oscilaron entre el 50% y el 60%, según los artículos.
La afluencia a las principales tiendas de la calle Duarte y del Distrito Nacional fue escasa, con pocas personas que entraban en las tiendas y salían con las manos vacías.
Los descuentos oscilaban entre el 50% y el 60%, según el artículo del Black Friday.
Las opiniones de varias personas que visitaron cada tienda variaban, ya que algunos decían estar satisfechos con la campaña y otros afirmaban que no había diferencia de precios.
‘Una lavadora que se vendía en 28 mil pesos hoy se vendió en 23 mil pesos’, dijo Radhame Soriano, quien aprovechó el Black Friday para comprar un regalo para su madre.
Un hombre, que no quiso ser nombrado, dijo que fue a comprar una lavadora pero sólo le hicieron un descuento de 1,000 pesos, así que la compró porque ya estaba y no quedó satisfecho.
Los vendedores ambulantes se quejaron de lo lento que estuvo en comparación con años anteriores.
La vendedora informal Yoquivera Reyes, quien lleva 30 años vendiendo cepillos de dientes y papas fritas, dijo: «Estamos feos porque no vendimos nada».
En tanto, Pedro Martes, encargado de Garrido’s, en la calle Duarte, dijo que los comerciantes de toda la vida aseguraron que los clientes aprovecharon la oferta y siguieron comprando durante todo noviembre.
Nikauri Martínez, encargada de la tienda Colipio, en la sucursal John F Kennedy, dijo que los artículos más solicitados fueron electrodomésticos, principalmente televisores de 65 pulgadas y freidoras de aire.
Los comerciantes aseguran que han recibido una buena acogida, pero el panorama es diferente y observamos locales vacíos y tiendas con poca o nula afluencia de personas.
Había pocas patrullas de policía en las tiendas y ninguna presencia del Instituto Nacional de Protección de los Derechos del Consumidor (Pro Consumidor).