La Fundación Caminantes por la Vida, institución social del Grupo SID, ha donado unidades de aislamiento especiales para pacientes inmunodeprimidos al Instituto Nacional de Cancerología Rosa Emilia Sánchez Pérez de Tavares (Incarto).
La donación es un paso trascendental en el tratamiento integral de las enfermedades hemato-oncológicas y fortalecerá la infraestructura y la calidad del tratamiento en Incarto, según la fundación.
El proyecto, en el que se han invertido más de 16 millones de reales, garantizará una atención integral y especializada a los pacientes que requieren un aislamiento estricto debido a su susceptibilidad a las enfermedades infecciosas.
Situada en la planta baja del Inkert, la unidad cuenta con seis habitaciones privadas, cada una de ellas equipada con una cama de posicionamiento, una mesa anexa, un sillón, una mesa de alimentación, una toma de suministro de oxígeno, una bomba de infusión y un monitor de constantes vitales.
Además, hay una zona de enfermería de última generación para la gestión electrónica de expedientes, con enlaces directos al laboratorio, el banco de sangre y el centro de diagnóstico por imagen. La sala también cuenta con un espacio acristalado para los familiares, que pueden recibir apoyo emocional sin comprometer el aislamiento necesario.
Ana Bonetti, presidenta de la fundación, subrayó el firme compromiso de la fundación de proporcionar salud y esperanza a los enfermos de cáncer.
Esta zona de aislamiento no es sólo un refugio seguro para los pacientes con inmunidad comprometida, sino también un símbolo del cambio positivo que podemos lograr juntos”, declaró la Presidenta Bonetti.
