A punto de terminar el año, este año ha sido accidentado en el sector justicia, con casos de corrupción administrativa en etapa de investigación preliminar y sin condenas por este tipo de delitos, que han causado gran daño al país y dañado la esperanza de muchas personas.
El Ministerio Fiscal, como acusador de estos delitos, ha presentado acusaciones en casos relacionados con especies marinas nombradas, como pulpos, corales, medusas y calamares. Se espera que se levanten las medidas cautelares contra los acusados.
El 18 de enero de este mes, el Segundo Juzgado Parroquial levantó las medidas cautelares contra Alexis Medina, el principal acusado en el caso Antipulpo, y ordenó que se le quitaran los grilletes.
Alexis Medina sigue en libertad para continuar su juicio por el caso Antipulpo.
Esta decisión sentó las bases para el levantamiento de la prisión preventiva no sólo para los demás acusados del caso, sino también para otras personas que habrían corrido la misma suerte.
Este año, la Fiscalía ha reducido la intensidad de los procesos por corrupción y se ha centrado en los casos que perseguía desde 2020. También se han reducido los registros domiciliarios.
Este aparente debilitamiento de la maquinaria de persecución penal ha acabado con cualquier esperanza que tuvieran las autoridades de la PGR, encabezadas por la juez Miriam Germain.
Con base en el principio de igualdad, los tribunales se verán obligados a modificar las medidas de apremio contra otros acusados en casos de corrupción.
La juez Icel Soto también ordenó que se prohibiera a Medina salir del país y ordenó una garantía financiera de P60 millones.
El tribunal declaró que la Fiscalía no había aportado justificación alguna para poner al principal acusado del caso Antipulpo bajo arresto domiciliario y con grilletes.
Según el organismo acusador, Medina supuestamente utilizó su posición como hermano del entonces presidente de la República, Danilo Medina Sánchez, quien ejerció dos periodos constitucionales entre 2012 y 2020, para dirigir una red criminal a nivel operativo.
A través del tráfico de influencias y múltiples violaciones a la ley, los imputados en el caso lograron crear una red corporativa de millonarios y beneficiarse de los fondos de los contribuyentes recibiendo miles de millones de pesos en pagos del Estado a través de operaciones ilegales utilizando personas físicas y jurídicas, dijo el MP.
El caso Medussa se encuentra en la etapa de instrucción y la audiencia se suspenderá hasta que el DOJ decida sobre la impugnación ante el pleno de la Corte Nacional de Apelaciones del Fuero Nacional.