Un terremoto de magnitud 7,6 registrado el sábado por la noche llevó a las autoridades a emitir una alerta de tsunami para la costa de las provincias de Surigao del Sur y Davao Oriental, en la parte oriental de Mindanao.
Las autoridades filipinas informaron el lunes de que seguían produciéndose 1.726 réplicas del terremoto de magnitud 6,6 del sábado frente a la costa meridional de Filipinas, que provocó una alerta de tsunami y causó la muerte de al menos dos personas, entre ellas una mujer embarazada.
En una entrevista con los medios de comunicación locales, Teresito Bacolco, director del Instituto Filipino de Sismología (Phivolcs), dijo que las réplicas oscilaban entre 1,1 y 6,6 grados de magnitud, todas ellas próximas al fuerte terremoto de magnitud 7,6 que sacudió el sábado las aguas al este de Mindanao, en el sur de Filipinas.
El seísmo de magnitud 7,6 del sábado por la noche llevó a las autoridades a emitir una alerta de tsunami para las costas de las provincias de Surigao del Sur y Davao Oriental, en el este de Mindanao.
El Departamento Filipino de Sismología Phivolcs suspendió la alerta de tsunami unas cuatro horas después de registrar olas altas de hasta 64 cm por encima del nivel normal de las mareas.
En Japón, al noreste de Filipinas, se observaron tsunamis de hasta 40 cm en varias islas periféricas.
La Oficina de Defensa Civil (ODC) confirmó el lunes que al menos dos personas habían muerto en el terremoto del sábado.
La ODC también informó de que nueve personas resultaron heridas en el seísmo, al menos 102 casas quedaron completamente destruidas y 743 parcialmente dañadas.