Tras licenciarse como contable, volvió a la universidad para animar a su hija menor, que acababa de dar a luz, a terminar la carrera de Derecho.
Doña Margarita declara su inocencia y está convencida de que nunca se demostrará su culpabilidad: a sus 78 años, cuenta una historia de muchas victorias y pequeñas derrotas. Inspira paz y tranquilidad a quienes no le deben nada.
Es acusada de delitos que cree infundados y experimenta una sensación de impotencia y desesperación mientras espera el juicio.
Se confiesa incrédula e impotente ante el trato recibido después de una carrera íntegra, en la que había dado la cara contra viento y marea y demostrado un firme compromiso con la búsqueda de la justicia y la democracia en este país.
En el limbo jurídico, volvió a las aulas y motivó a su hija menor para que se licenciara en Derecho.
Su abuela completó su segunda carrera en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), donde se graduó en primer lugar en su programa de maestría.
Obtuvo una maestría en derecho procesal administrativo con 100 puntos por su tesis sobre las responsabilidades administrativas de los funcionarios públicos en relación con la función supervisora de la Junta de Auditores.
Formación.
Margarita Melenciano Corporán fue una destacada mujer dominicana cuya vida ha estado marcada por su dedicación al servicio público y a la defensa de los derechos de los ciudadanos.
Nació el 4 de febrero de 1945 en Pomier, Borbón, San Cristóbal.
Nació en el seno de una familia numerosa. Es una de 12 hermanos, entre hijos de su padre, hijos de su madre e hijos de sus padres.
Sus padres murieron cuando tenía seis meses, y comenzó su vida en Santo Domingo, donde creció en el barrio de Vila Concero.
Comenzó su educación en escuelas cubanas y luego en un instituto de Estados Unidos, pero tuvo dificultades debido a la situación política de la época.
Un coche Volkswagen (Sepiro) le llevaba y le traía de casa a la escuela, y la detención y tortura de su padre, Isaías Melenciano Heredia, en 1960, durante el régimen de Trujillo, tuvo un profundo impacto en su vida.
ACTIVIDADES.
Margarita fue una mujer políticamente activa desde muy joven.
Su participación como dirigente en los movimientos estudiantil y socialista la llevó a enfrentarse a situaciones difíciles bajo la dictadura. ‘Fui izquierdista y cutlassista, después del MPD, en el fervor de la juventud de entonces.
En 1965 estalló la Revolución de Abril y fui expulsado del Instituto Miguel Ángel Garrido por dirigir una asamblea no autorizada por el director».
Aquel castigo no cambió su determinación de luchar activamente por el restablecimiento de la Constitución y el regreso de Juan Bosch a la Presidencia de la República sin elecciones.
En los años 20 y después de la guerra, luchó por la defensa de los derechos de la mujer junto a Consuelo Despradel, Magali Pineda, Carmen Masala y Lourdes Contreras. Desgraciadamente, la intervención de los partidos políticos llevó a la Liga de Mujeres a su peor final».
Recuerda con tristeza haber sido la primera dominicana en enarbolar la bandera comunista en la UASD tras la creación del Partido Comunista Dominicano (Pacoledo).
A pesar de las dificultades, Doña Margarita continuó sus estudios, destacando como estudiante y obteniendo la licenciatura en Contabilidad por la Universidad Autónoma.
Vida personal y carrera profesional
Se casó con un chico de la localidad que era publicista de Belmúdez y más tarde fue ascendido a vendedor.
Ella y Rafael Rincón Rodríguez tienen tres hijos, Danise, Denise y Dania, todos ellos profesionales de talento, y tres nietos. Permanecer casado es el código de la vida, y si surge una crisis, el más sabio cede, y si el otro está luchando, te echas atrás.
A lo largo de su carrera ha ocupado diversos cargos en instituciones educativas como la UASD y la Universidad Nacional Pedro Henríquez Ureña (Unphu).
También ha trabajado para la Junta Central Electoral (JCE), el Seguro Nacional de Salud (Senasa) y el Ministerio de Salud Pública, donde desempeñó un papel clave en áreas de gestión y control, como auditora, tesorera y docente. También fue miembro del pleno de la Contraloría y Auditoría General (CC).
Recuerda que fue despedida de la UASD porque, durante su mandato, el Presidente le ordenó pagar facturas pendientes para las que la UASD no tenía fondos. Paradojas de la vida: …… porque ella misma era beneficiaria de los fondos sobrantes.
Está orgullosa de haber dejado el JCE en 2003. Allí también me despidieron. Me despidieron prácticamente por negarme a pagar un material del que tenía factura pero no podía demostrar que lo había recibido».
Laberinto jurídico
Doña Margarita también se ha enfrentado a situaciones difíciles. Por ejemplo, en su opinión, cuando fue acusada falsamente y llevada a la Fiscalía Especial para la Persecución de la Corrupción Administrativa (Pepca).
Tras destaparse el escándalo de presunta corrupción en anteriores administraciones del Partido de la Liberación de Dominica (PLD), surgieron dudas sobre las sesiones plenarias de la CC.
La gestión de los miembros de la CC ha sido acusada por las autoridades judiciales de supuestamente encubrir o no procesar a tiempo casos importantes de los medios de comunicación.
Según Margarita, ha sido citada tres veces por Pepka tras el discurso del Presidente, que les acusaba de negligencia y dejadez.
Margarita ha escrito unas memorias para que sus nietos conozcan su vida de integridad, valentía y lucha por la verdad, la justicia social, la democracia y la transparencia administrativa.
La espiral de unas 250 páginas contiene 12 votos discrepantes contra otros tantos informes de auditoría presentados sin condiciones, a pesar de la mala gestión de fondos descubierta en los organismos auditados.
Venía con todas las pruebas. Son todos los votos negativos que emití cuando me opuse a la decisión en el Pleno, de conformidad con el apartado 4 del artículo 55 de la Ley nº 107-13.
Sigue esperando que el proceso siga su curso y dice no entender los motivos de la citación.
La abuela de Summa Cum Laude, cuya historia de vida está dedicada a la mejor causa de este país, espera con paciencia y confianza escribir el último capítulo de su historia.