MADRID. Un fuerte aumento de los extranjeros que solicitan asilo en España llega al aeropuerto madrileño de Barajas, en medio de un año récord para los inmigrantes que llegan por mar a las Islas Canarias españolas (Atlántico), desbordando las salas habilitadas para atenderlos.
A punto de finalizar 2023, la situación en el aeropuerto madrileño ha llevado a un grupo de magistrados a pedir al Gobierno que tome medidas, pero tras un año volcado en el mar, también debe hacerlo en este vulnerable centro de llegada de extranjeros.
Según el Ministerio del Interior, hasta el 15 de diciembre habían llegado a España 51.739 inmigrantes por esta vía, casi el 72% de ellos a Canarias.
Esta semana han saltado las alarmas en el aeropuerto de Barajas. En los últimos meses han aumentado las solicitudes de asilo de personas que creen amenazados sus derechos fundamentales en sus países de origen.
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A raíz de una denuncia de la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR), tres juzgados madrileños anunciaron el pasado viernes que habían encontrado salas de dos terminales aeroportuarias abarrotadas de solicitantes de asilo a la espera de que sus solicitudes fueran aceptadas.
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Según la concurrencia del juez, la Policía de Madrid informa de que la capacidad de ambas salas es de 156 personas, pero que en ellas están alojadas 244, de las que 19 son menores.
A continuación, explica que desde agosto del año pasado, el aumento de solicitudes de asilo en la frontera ha sido exponencial, pasando de 767 entre agosto y noviembre de 2022 a 1357 en el mismo periodo de 2023.
Según fuentes del Ministerio del Interior consultadas por EFE, el departamento tiene previsto habilitar un nuevo espacio en el aeropuerto para acoger temporalmente a los inmigrantes como medida transitoria.
Fuentes sindicales reprochan el preocupante estado de higiene y la gran cantidad de basura en el suelo, así como un brote de chinches que ha obligado a desinfectar las habitaciones en dos ocasiones en los últimos meses.
La mayoría de los inmigrantes solicitantes de asilo que llegan al aeropuerto proceden del continente africano, con algunos llegados de Somalia en los últimos días con pasaportes kenianos falsos comprados a la policía somalí, y 21 menores no acompañados procedentes de Casablanca (Marruecos).
Elena Muñoz, coordinadora estatal de Servicios Jurídicos de CEAR, ha explicado que estas instalaciones están diseñadas para permanecer en ellas un máximo de 10 días, pero con el aumento de llegadas, permanecerán hasta 25 días, con problemas de privacidad e higiene.
Según datos del Ministerio del Interior, entre el 1 de enero y el 30 de noviembre de 2023, España recibió 152.250 solicitudes de asilo, casi un 22% más que en todo el año 2022.
Fuentes sindicales afirmaron que los policías que realizan las entrevistas de asilo sobre el terreno están desbordados y, debido al colapso, prácticamente todas las solicitudes son admitidas a trámite, a pesar de que la mayoría de los solicitantes no cumplen los requisitos.
Funcionarios policiales entrevistados por EFE coincidieron con esta opinión e informaron de que la mayoría de las personas que llegan a España y están a punto de ser devueltas solicitan asilo en ese momento para evitar ser devueltas. Para que se reconozca este derecho, la ley exige que la solicitante sea víctima de persecución por motivos de raza, religión, opinión política u orientación sexual en su país y que esta persecución constituya una violación grave de sus derechos fundamentales.
Sin embargo, CEAR niega que el aumento del número de solicitudes haya hecho que se concedan más solicitudes que antes, y cree que las solicitantes de zonas en conflicto, como Somalia, y de zonas donde no se respetan los derechos de las mujeres, como Guinea, lo merecen.
