Esto es un completo disparate. Creo que el propio [presidente estadounidense] Biden entiende que es sólo una forma de hablar para justificar su política desestabilizadora hacia Rusia”.
El presidente ruso, Vladimir Putin, ha negado hoy que su país vaya a atacar a la OTAN o a luchar junto a ella si continúa la guerra en Ucrania.
Esto es un completo disparate. Creo que el propio [presidente estadounidense] Biden comprende que no es más que una forma de hablar para justificar su política desestabilizadora hacia Rusia”, declaró a un programa de televisión moscovita. Kremlin, Putin.
Putin se refería a las declaraciones de Biden hace dos semanas en las que instaba al Congreso de Estados Unidos a aprobar un nuevo paquete de ayuda militar para Ucrania.
Si Putin se apodera de Ucrania, no se detendrá ahí. No podemos dejar que Putin gane”, dijo entonces Biden, añadiendo que Washington se vería entonces obligado a enviar tropas estadounidenses para luchar contra las fuerzas rusas en Europa.
El Kremlin suele afirmar que ya está luchando contra la OTAN en Ucrania porque Occidente suministra armas a Kiev, pero Putin argumentó que
Toda la OTAN no debe dejar de entender que Rusia no tiene ningún motivo, ningún interés, ningún interés geopolítico, económico, político o militar en luchar contra los países de la OTAN.
Putin subrayó que este bloque militar es el patio trasero de la OTAN y, por tanto, incluye a Estados Unidos, al que calificó de único propietario de la OTAN.
Lo mismo se aplica a otros países de la OTAN. ¿Con quién tenemos problemas? Con nadie. No quieren tener competidores como Rusia, así que crean artificialmente problemas con nosotros, argumentó.
Por el contrario, el Kremlin está interesado en desarrollar relaciones con estos países, afirmó.
El presidente del Kremlin, que el jueves declaró en rueda de prensa que no habrá paz en Ucrania hasta que Moscú logre sus objetivos, está convencido de que la derrota estratégica de Rusia en el campo de batalla no servirá a largo plazo a los intereses nacionales de Estados Unidos.
Al mismo tiempo, advirtió a Finlandia, el miembro más reciente de la OTAN, que comparte 1.340 km de frontera con Rusia.
Hasta ahora no ha habido problemas. Ahora tenemos un problema. Crearemos el Distrito Militar de Leningrado [Noroeste] y concentraremos allí ciertas unidades militares”. Un completo disparate.
La cuestión territorial entre Finlandia y Rusia se resolvió a mediados del siglo XX y lamentamos que Finlandia se haya visto arrastrada a la OTAN.
Mantenemos unas relaciones muy buenas y amistosas, insistió.
Moscú pretende reforzar su flanco noroccidental, especialmente en torno a San Petersburgo, la segunda ciudad más grande de Finlandia, que está a sólo 300 km de la capital finlandesa, Helsinki.
Los expertos creen que la pertenencia de Finlandia a la Alianza Atlántica es uno de los mayores errores de cálculo de Putin cuando lanzó su campaña militar en Ucrania en febrero de 2022.
Esta semana, el Kremlin ya ha advertido de que el despliegue de tropas estadounidenses en territorio finlandés supone una clara amenaza para Rusia.
Finlandia y Estados Unidos han acordado un Acuerdo de Cooperación en materia de Defensa (ACD), que permitirá a las fuerzas estadounidenses utilizar 15 bases militares en el norte de Europa. En retrospectiva, Putin también admite su ingenuidad en sus primeros años al frente del Kremlin, al pensar que sus antiguos enemigos de la Unión Soviética comprenderían que Rusia era un país diferente, que la confrontación ideológica había terminado y que había que abandonar la política de enfrentamiento entre bloques.
Acusó entonces a Occidente de intentar romper la Federación Rusa tras la disolución de la Unión Soviética en 1991.
Una Rusia dividida, dijo, perdería entonces su peso y su voz, y no podría defender sus intereses nacionales como una Rusia unida.
El dirigente ruso sostiene que el mundo está cambiando y que, después de 500 años, Occidente ya no es la única potencia hegemónica del planeta.