Las condiciones favorables se mantendrán gracias a los vientos del este-sureste, y las precipitaciones continuarán a lo largo del día.
Según la Oficina Nacional de Meteorología (Onamet), desde primeras horas de este martes se ha desarrollado una vaguada con aguaceros moderados, tormentas eléctricas y vientos racheados provocados por un frente situado al oeste de Haití y que se encuentra prácticamente estacionario.
Además, la influencia de los vientos del este-sureste mantendrá condiciones favorables para que continúen las precipitaciones diurnas, especialmente en las provincias del Caribe, noroeste, noreste, suroeste, cordillera central y fronteriza.
Estos estados son Pedernales, Barahona, Azua, San Juan, Peravia, Sánchez Ramírez, La Vega, Monseñor Nouel, Monte Cristi, Dajabón, Santiago Rodríguez, Puerto Plata, San Cristóbal, San José de Ocoa, La Romana, San Pedro de Macorís, El Seibo, Hato Mayor, Samaná, La Altagracia y El Gran Santo Domingo (incluyendo los distritos nacionales).
Estas lluvias continuarán extendiéndose a otras zonas aledañas.
Debido a estas lluvias y a las que se esperan en las próximas 24-48 horas, la Onamet ha emitido un aviso meteorológico para Santiago, Samaná, Duarte, La Vega, Monseñor Nuel, San José de Ocoa, Azua, Barahona, Pedernales e Independencia.
Se emitieron avisos meteorológicos para Puerto Plata, Hermanas Mirabal, María Trinidad Sánchez, Espaillat, Santo Domingo, San Cristóbal, Monte Plata, San Pedro de Madrid y Peravia.
En estos estados, los ríos y arroyos pueden desbordarse, las inundaciones rurales y urbanas y los deslizamientos de tierra son posibles.
En la costa atlántica, desde Cabo Cabrón hasta Cabo San Rafael, se recomienda a los operadores de embarcaciones pequeñas y medianas frágiles que operen cerca del límite costero y permanezcan fuera del agua debido a los vientos y olas inusuales, pero el resto de la costa es normal.
Las temperaturas seguirán siendo agradables a frescas, sobre todo en las montañas y los valles del interior, especialmente por la noche, las madrugadas y las primeras horas de la mañana, debido a las corrientes.