Nos dirigimos hacia una nueva versión de las elecciones de 2020, a las que la mayoría de los estadounidenses se oponen, pero probablemente no lo harán. Qué otra opción: estaría Joe Biden en contra Donald Trump, dos candidatos que no lograron convencer a todos en su partido. Especialmente Joe Biden porque tiene 81 años.
Ambos enfrentan primarias por la nominación. Por el lado del Partido Demócrata, dos candidatos han decidido enfrentarse al actual presidente, el vicepresidente Dean Phillips y a la autora del libro sobre desarrollo personal Marianne Williamson, pero las intenciones de voto no superan el 10%. Entre los republicanos, la popularidad de Donald Trump no es motivo de preocupación: las encuestas le dan una gran ventaja sobre sus rivales, especialmente Nikky Haley y Ron DeSantis, y planea demostrarlo en las primeras primarias republicanas en 15 días, los Caucus de Iowa.
Había dudas sobre su edad, que su equipo intentó disipar sin verdadero éxito. Si es reelegido, se convertirá en el presidente de mayor edad en la historia de Estados Unidos. Pero su problema va más allá de las 81 velas que apagó el pasado noviembre.
Sus políticas económicas, por muy efectivas que hayan sido en el mercado laboral, cuentan con la oposición de la mayoría de los estadounidenses, que confían más en Donald Trump. Especialmente en los siete estados en conflicto que son decisivos en las elecciones. Joe Biden aseguró su victoria en 2020 por un estrecho margen de 44.000 votos en tres de estos estados indecisos: Arizona, Georgia y Wisconsin.
Otro obstáculo para Joe Biden son los problemas legales de su hijo Hunter, acusado de fraude fiscal entre otros delitos. Podría ser juzgado este año. Acusado de querer anular los resultados de las elecciones de 2020, será juzgado el 24 de marzo.
Es posible que se agreguen juicios adicionales en medio de la campaña electoral. Pero ahora, Donald Trump está aprovechando sus problemas con la ley para construir su imagen de extranjero injustamente oprimido por el sistema. Y esta estrategia parece estar funcionando.
En cualquier caso, a 10 meses de las elecciones, su popularidad crece entre los votantes considerados decisivos: latinos, independientes, jóvenes y afroamericanos. Pero la historia nos enseña que hay que tener cuidado a la hora de investigar. Una campaña electoral en Estados Unidos siempre está llena de giros y sorpresas.
Y esto promete estar lleno de sorpresas. Muchas víctimas de un tiroteo en una escuela en Iowa, EE.UU.