Presidente Román Jaquez Liranzo asegura que todos los dominicanos pueden dormir tranquilos y que habrá elecciones justas y transparentes el 18 de febrero. Las fallas tecnológicas reveladas por la Comisión Central Electoral (JCE) despertaron los fantasmas que atormentaban al país hace cuatro años, durante la suspensión de las elecciones municipales en febrero de 2020. Aunque son dos sistemas diferentes, desde el intento de implementar el voto automatizado hace cuatro años, ha permanecido en la conciencia política el miedo a confiar plenamente en el uso de las políticas de los partidos y de las personas.
Este temor comenzó cuando se informó que el Centro de Promoción y Consulta Electoral (CAPEL) había descubierto fallas y vulnerabilidades en los dispositivos de escaneo, captura, impresión y transmisión de datos (EDET), que serán utilizados por la Comisión Central Electoral (JCE) en el elecciones del 18 de febrero. Durante las pruebas realizadas por los técnicos de CAPEL se descubrió que el sistema operativo EDET tenía una autenticación inadecuada y muchas vulnerabilidades, así como si la base de datos local tenía o no la autenticación correcta. Agregue a esto la falta de restricciones de acceso al hardware y la falta de firma de código, protección insuficiente contra malware, falta de controles para evitar que se conecten dispositivos no autorizados y la base de datos de Power de fábrica tiene muchas vulnerabilidades.
Poco después comenzó la histeria entre los partidos de oposición, que cuestionaron la seguridad de los equipos y la confianza depositada en la JCE, a menos de un mes del proceso electoral de febrero. Entre ellos se encuentra el Partido de la Liberación Dominicana (PLD), que asegura que las vulnerabilidades registradas en la segunda prueba realizada por la Comisión Central Electoral (JCE) para escaneo, escaneo y transmisión de datos incluso pueden ser pirateadas. Específicamente, el secretario de Elecciones del PLD, Tommy Galán, explicó que técnicos designados por el organismo buscaron penetrar la configuración de Internet de las impresoras utilizadas en la prueba realizada el pasado 20 de enero, demostrando así la prevalencia de la inseguridad tecnológica en los equipos.
Por parte de la JCE, la reacción fue casi inmediata, pues su presidente, Román Jaquez Liranzo, aseguró que todos los dominicanos podrían dormir tranquilos y que el 18 de febrero habría elecciones justas y transparentes. Jhonny Rivera, director de TI de la JCE, quien acompañó a Jáquez junto a otros integrantes durante el pleno, explicó que según la evaluación realizada por CAPEL, se han implementado 19 de 24 recomendaciones, o sea un 79%. Socializar en fiestas Luego de presentar los resultados de la auditoría, al día siguiente el panel técnico de la JCE compartió con las organizaciones políticas todos los detalles del proceso técnico de la EDET y otros aspectos de las elecciones municipales.
Durante la reunión, representantes de partidos políticos expresaron dudas y reclamos al equipo técnico de la JCE, especialmente respecto de la seguridad de los equipos que transmiten los resultados de las elecciones municipales del domingo 18 de febrero. Según el comunicado del representante del partido, además de las debilidades descubiertas durante la auditoría realizada por CAPEL, tanto el oficialismo como la oposición también expresaron dudas sobre el uso de memorias USB como medio de respaldo de la ley de seguridad. .
. Javier Ubiera, de Fuerza del Pueblo, enfatizó que usar la memoria trae inseguridad, argumentando que es un dispositivo fácil de reemplazar. Sin embargo, Robert Arias, del gobernante Partido Revolucionario Moderno (PRM), afirmó que su partido político está de acuerdo con el uso de la herramienta, asegurando que en caso de que algún equipo deje de funcionar, el dispositivo conservará los resultados del conteo sin necesidad de reiniciarlo.
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