El presidente estadounidense Joe Biden (izquierda) escucha al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, leer una declaración antes de su reunión en Tel Aviv el 18 de octubre de 2023. En una llamada telefónica privada, el presidente estadounidense Joe Biden llamó idiota al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, al hablar del reciente ataque de Tel Aviv a la zona de Rafah, según fuentes de la cadena israelí NBC. Esta no es la primera vez que el presidente Biden expresa su decepción con Netanyahu.
Se dice que este tipo lo llamó varias veces y lo acusó de causar problemas al oponerse a los acuerdos de alto el fuego. La discordia actual surgió en el contexto de la operación militar planeada por Israel en Rafah, una medida que ha provocado reservas de Estados Unidos. Según se informa, el presidente Biden culpó a Netanyahu por la negativa de Israel a cambiar sus tácticas militares en la lucha contra Hamás.
Leer más: Dos rehenes argentinos fueron rescatados por el ejército israelí Tras la llamada telefónica del domingo entre el presidente Biden y Netanyahu, la Casa Blanca emitió una declaración en la que describía objetivos compartidos para derrotar a Hamás y garantizar la seguridad de Israel a largo plazo. Sin embargo, Biden enfatizó la necesidad de medidas urgentes y específicas para mejorar la asistencia humanitaria a civiles palestinos inocentes. La Casa Blanca dijo que no se debería llevar a cabo una operación militar en Rafah sin un plan creíble y factible para garantizar la seguridad y el apoyo de más de un millón de refugiados allí.
Respecto a su relación, un portavoz del Consejo de Seguridad Nacional reconoció los desacuerdos de Biden con Netanyahu, pero enfatizó la relación respetuosa de décadas entre ambos líderes. Más información: Guerra en Gaza: más de 160 muertos y 200 heridos tras los ataques israelíes de las últimas horas Informes de Politico a principios de febrero mostraron que Biden llamó a Netanyahu villano en discusiones privadas. Las tensiones entre Biden y Netanyahu han persistido durante el año pasado, exacerbadas por las acciones de miembros de extrema derecha del gobierno y las reformas judiciales propuestas.
