ESSEN (dpa-AFX) – El proveedor de energía Eon superó sus propias previsiones para 2023. Además, la empresa que cotiza en el DAX superó las expectativas del mercado con rentabilidades ajustadas a los efectos. En el último trimestre, Eon se benefició de efectos puntuales y de la liberación de reservas invernales que la compañía energética había acumulado en caso de que la crisis energética empeorara.
La reacción del mercado de valores fue moderada. El precio de las acciones subió inicialmente un 1,7% el viernes por la mañana, pero luego cayó alrededor de medio punto porcentual. Por tanto, se sigue cotizando entre 12 y 13 euros.
Los precios se han mantenido en este nivel desde diciembre. En una primera reacción, la analista Wanda Serwinowska, del banco suizo UBS, también calificó los datos clave como neutrales sobre la acción. Más importante es la perspectiva empresarial para 2024 y el plan empresarial hasta 2028, que se espera para marzo, cuando se publicarán las cifras definitivas.
El analista de JPMorgan, Javier Garrido, también señaló que el mercado esperaba el aumento de ganancias. Al fin y al cabo, la dirección no ha podido explicar por qué no se ha aumentado el objetivo anual al presentar las cifras del tercer trimestre: según las cifras preliminares, el beneficio neto ajustado para 2023 ascenderá a 3.100 millones de euros, frente a los 2.700 millones de euros del año anterior, según Eon anunciado repentinamente el jueves después del cierre del mercado de valores. La empresa con sede en Essen tenía previsto entre 2.700 y 2.900 millones.
Los analistas esperaban una cifra saludable de 2.900 millones. Según Eon, los beneficios del negocio de grandes redes superaron las expectativas en el cuarto trimestre, debido principalmente al rendimiento en la mayoría de los países. Además, los impactos temporales en Alemania se devolverán a los clientes en los próximos años, y los impactos únicos del ajuste en Eslovaquia tuvieron un impacto positivo en los resultados del cuarto trimestre, añadió.
Deepa Venkateswaran, analista de Bernstein, mencionó en particular una reducción de los costes de redistribución en el último trimestre. Según sus cálculos, esa cantidad ascenderá a unos 200 millones de euros. Los costos de redistribución surgen cuando los operadores de redes de transmisión y distribución interfieren con la capacidad de producción de los generadores de energía.
Las centrales eléctricas pueden ralentizarse o reiniciarse, los paneles solares pueden reducirse y las turbinas eólicas pueden girar en la dirección del viento. Esto evita congestiones y sobrecargas en la red eléctrica. En un sector de ventas tradicionalmente más pequeño, Eon también registró reservas de invierno para el cuarto trimestre.
El director financiero, Marc Spieker, ha incluido 300 millones de euros en los objetivos anuales fijados para poder hacer frente a posibles travesuras en el mercado energético en caso de que la situación siga deteriorándose. Los impactos negativos de una posible degradación medioambiental en el sector energético sobre la división Customer Solutions, que ya estaban tenidos en cuenta en las previsiones, aún no se han materializado. El beneficio consolidado antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización (EBITDA) ajustado de efectos especiales aumentó casi un 17% interanual hasta los 9.400 millones de euros.
La mejor previsión de Eon fue de 8.800 millones, igual a las predicciones de los analistas. Los distintos segmentos del grupo han contribuido a este desarrollo sorprendentemente bueno. El beneficio operativo ajustado de Redes de Energía aumentó una quinta parte hasta los 6.600 millones de euros.
La división Customer Solutions aumentó el beneficio operativo en dos tercios, hasta los 2.800 millones de euros. Los resultados del grupo fueron mejores de lo esperado, a pesar, entre otras cosas, de haber invertido más dinero en la expansión de la red de lo previsto inicialmente. Las inversiones ascendieron a 6,4 mil millones de euros, frente a unas previsiones de alrededor de 6,1 mil millones.
Adaptar la infraestructura de red para dar cabida a la transición energética será costoso, pero también garantizará el crecimiento futuro de Eon. Por tanto, para Garrido, analista de JPMorgan, las mayores inversiones en 2023 también son un buen augurio para el aumento de los planes de inversión a medio plazo que espera. Actualmente, Eon planea invertir alrededor de 33 mil millones de euros hasta 2027.
Tradicionalmente, el Grupo ampliará el plan un año durante su conferencia de prensa anual. Los detalles de los proyectos de inversión, las ganancias netas sin partidas especiales y una reseña del nuevo año se proporcionarán cuando se presente el informe anual el 13 de marzo./mis/lew/niw/jha/