Hice este video para que te des cuenta que no tengo moretones en el cuerpo, para que te des cuenta que estoy limpio, si pasa algo tú y las autoridades también ya sabrán lo que pasó. Si ahora mismo parezco muerto, ahorcado o envenenado, ya sabes de dónde viene eso. Quien pronunció estas palabras fue el preso Gregorio Camacho, quien, tras matar a puñaladas a su pareja durante una visita conyugal en el penal fortaleza de La Concepción de La Vega, grabó un vídeo en el que realiza ‘acción’ pero también advierte de lo que podría le pasó y lo que realmente le pasó.
Puedes leer: Otra victoria Y ello a pesar de que tras cometer el crimen fue trasladado a otra prisión, supuestamente para protegerlo de represalias, donde fue encontrado muerto el jueves por la mañana en la celda donde fue ahorcado. Pero a partir de las circunstancias y de la existencia del vídeo en el que advertía sobre su posible suicidio, es fácil adivinar qué le pasó realmente. No tengo ninguna duda de que después de cometer un crimen tan deleznable, quitarle la vida a una joven a tan temprana edad, muchos dirán que se ha hecho justicia, y me temo que las autoridades penitenciarias, que fueron en gran parte responsables, por su imprudencia , por su muerte.
Es por esto que me parece poco probable que si esto fue un asesinato por venganza, como todos sospechaban, que aparezca el responsable o responsable de este hecho en la actualidad, por lo que seguirá siendo así. Pero la justicia penitencial alentada por esta sed de venganza no lograría dar vida a Casandra Carmelina Castillo Santiago, cuyo infortunio había puesto en su camino al verdugo, ni impediría que esto siguiera ocurriendo en las cárceles dominicanas, donde delincuentes y criminales, a pesar de estar presos y bajo vigilancia, todavía tienen lo necesario para seguir robando, defraudando y asesinando.