Indianápolis (EE.UU.).- Mac McClung, base de 188 cm del Osceola Magic en la G League, selló su sello el sábado de esta semana, logro celebrado por una sola persona. Michael Jordan y otros tres jugadores en la historia de la NBA se coronaron campeones del concurso de mates All-Star por segunda vez consecutiva. Este base sólo tiene cuatro partidos de experiencia en la NBA, uno con Los Angeles Lakers, uno con los Chicago Bulls y dos con los Philadelphia 76ers, pero ya ha escrito su nombre en la historia de la liga estadounidense de baloncesto.
Venció a la superestrella de los Boston Celtics, Jaylen Brown, quien firmó un contrato de cinco años y 305 millones de dólares el verano pasado. Sólo Michael Jordan, Jason Richardson, Nate Robinson y Zach LaVine han sido coronados reyes de los mates dos veces seguidas. Convenció a todos.
A los jueces, Gary Payton, Mitch Richmond, Darnell Hilmann, primer campeón de esta competición (1977), y Dominique Wilking, ganador de la prueba de mates de Indianápolis 1985; y el público, que celebró por todo lo alto sus espectaculares mates. La elevación es el foco de la exposición de McClung. Puedes leer: Antetokounmpo: Quiero un All-Star estadounidense contra el resto del mundo Conectó en el primer intento de la final tras saltar sobre dos personas, una encima de otra, llegar al aro con la cabeza y cerrar con un potente mate a una mano.
En el segundo, le entregó una camiseta del Osceola Magic, talla XL, a O‘Neal y saltó sobre él con facilidad para realizar una voltereta hacia atrás. Terminó con 98,8 puntos sobre 100, frente a los 97,8 de Jaylen Brown, quien honró a su compañero Terrence Clarke, fallecido a los 19 años en 2021, con la primera volcada. El delantero de los Celtics proyectó una imagen de Clarke en la barandilla LED del Lucas Oil Stadium.
En la segunda foto, porta un guante plateado en su mano izquierda, un guiño a quienes lo criticaron por no saber usar su mano izquierda. Su 97,8 obligó a McClung a anotar al menos 49,1 para ganar, y el líder lo consiguió por un sorprendente 50 a 50. Puedes leer: Indianápolis reúne lo mejor de la NBA Su exabrupto llamó la atención del mexicano Jaime Jáquez, quien saltó al partido vistiendo una camiseta negra de Miami con el número 11, el lema “Cultura” en el frente y el nombre del equipo en español “the Heat”, un guiño a México.
En su primera volcada, colocó a Shaquille O’Neal frente a la canasta y saltó sobre él para realizar una poderosa volcada con una sola mano. A los jueces no les gustó especialmente y le dieron una puntuación media de 47,4 sobre 50. En la segunda ronda, logró dos mates tras un giro de 360 grados.
El 46,8 de los jueces casi lo elimina de la lucha por un lugar en la final. Jacob Toppin tampoco logró superar esta ronda, siendo superado con fuerza por McClung, quien avanzó con una puntuación total de 97,4. Recibe el balón, lo deja volar alto, antes de recuperarlo y realizar un mate inverso.
En el segundo asalto repitió el “revés”, tras una espectacular jugada acompañada de un molinete. Brown, por su parte, hizo que la multitud silbara cuando hizo su segundo mate después de recibir el balón de Jayson Tatum, saltando sobre el streamer Kai Cenat y enviando a la dura madera de los Boston Celtics volando por encima de las luces LED de la cancha. El All Star de Indianápolis concluirá este domingo con el Juego de Estrellas en Gainbridge Fieldhouse.
