El proceso de preparación incluye la evaluación por parte de una serie de especialistas, entre ellos cardiólogos, nefrólogos… Debe ser evaluado con un equipo preparatorio multidisciplinario: trasplante de riñón y páncreas, cirugía de trasplante de páncreas, endocrinología, oftalmología, odontología, neumología, cardiología, gastroenterología, urología, anestesiología, psicología, trabajo social, etc., además de realizar innumerables estudios. y análisis especiales para someterse al procedimiento.
El procedimiento quirúrgico consistió en colocar el injerto de páncreas en la parte inferior derecha del abdomen y el injerto de riñón en la fosa ilíaca izquierda. El páncreas nativo del paciente se deja en su posición original. Esta cirugía de trasplante de páncreas suele tardar de tres a seis horas, dependiendo de si se va a realizar un trasplante de páncreas único o un trasplante combinado de páncreas y riñón al mismo tiempo.
Después de un trasplante de páncreas exitoso, el nuevo páncreas producirá la insulina que el cuerpo necesita, por lo que ya no será necesaria la terapia con insulina para tratar la diabetes tipo 1, al igual que con un trasplante de riñón exitoso, el paciente ya no necesitará hemodiálisis. Será diferente. Durante el seguimiento tras un trasplante de páncreas, el paciente tomará fármacos inmunosupresores durante toda su vida para evitar que el organismo rechace el páncreas trasplantado.
Los medicamentos contra el rechazo actúan debilitando el sistema inmunológico, lo que también facilita las infecciones, especialmente en los primeros tres meses después del trasplante, cuando la inmunidad es más sensible pero después los pacientes se integran a sus vidas productivas. El 13 de enero de 2024, el Hospital General Plaza de la Salud, en la unidad de trasplantes, realizó con éxito el segundo trasplante funcional aislado de páncreas a un paciente de 38 años con diabetes tipo 1 desde los 10 años de edad, con función renal estable. .
. En otro trasplante de riñón realizado en 2019, tanto el daño renal como la necesidad de insulina fueron causados por la diabetes tipo 1 infantil. Para ambos procesos se preparó al estar en la lista de espera de donantes fallecidos durante cinco años para un trasplante de riñón y cuatro años después para un trasplante de páncreas, gracias al acto supremo de amor: la donación de órganos para salvar vidas.