El Día Mundial del Agua, celebrado ayer viernes, demuestra que República Dominicana está desactualizada a nivel legislativo en esta materia. Esto a pesar de que se han presentado varios proyectos de ley de agua a la Asamblea Nacional, con el objetivo de dotar al país de un marco legal para legitimar el sector según las exigencias de la nueva era. La triste realidad es que el organismo bicameral aún espera la iniciativa de ley de aguas redactada por el Gobierno, cuyo borrador sufrió modificaciones finales en octubre de 2023 y en esa fecha, decimos, será entregado al jefe de Estado.
Ministerio de Economía y Medio Ambiente dentro de una semana para decidir sobre el avance de la obra. Sin embargo, el proyecto de ley aún no ha llegado al parlamento. Máximo Castro Silverio, diputado por Santiago y miembro del Partido Reformista Social Cristiano (PRSC), en un nuevo intento por dotar al país de una herramienta para legalizar el preciado líquido, devolvió su proyecto de ley de agua a la Cámara de Representantes.
Fue presentada el 5 de marzo. La iniciativa fue enviada al Comité Permanente de Recursos Naturales y Medio Ambiente, durante su duodécima sesión mensual. Unos meses antes, en julio de 2023, el legislador reformista también presentó un proyecto de ley sobre agua potable y saneamiento, norma que, como la anterior, fue enviada a la misma comisión para su estudio y rescate.
Durante el cuatrienio 2020-2024, Don Máximo, como suele ser llamado en la Asamblea Nacional, continuó reintroduciendo ambas iniciativas, de manera periódica, ya que caducaban cada dos legislaturas, al no ser aprobadas y convertidas en ley. En 2022 y 2023 también se aprobaron los proyectos de ley de agua presentados por los senadores Eduardo Estrella (DxC-Santiago) y Valentín Medrano (PLD-Independencia). Ninguna ley fue reintroducida, por lo que los únicos proyectos de ley vigentes en el Congreso fueron los presentados por el congresista Castro Silverio.
Iniciativa gubernamental El proyecto de ley de aguas que está redactando el gobierno ha sido actualizado por el Viceministro de Tierras, Agua y Medio Ambiente, así como por la Dirección General de Derecho. Como se informó a principios de octubre de 2023, los funcionarios Pável Isa Contreras y Miguel Ceara Hatton, ministros de Economía y Medio Ambiente respectivamente, recibirán el proyecto de ley dentro de una semana, por lo que, si verifican la investigación, lo presentarán al Poder Ejecutivo. El Poder, por iniciativa legislativa, tiene derecho a presentar asuntos en cualquiera de las cámaras del Congreso.
Eso no ha sucedido todavía. El proyecto de ley del agua es una de las iniciativas más esperadas por la gente y también es una promesa del Gobierno. En este sentido, René Antonio Mateo, subsecretario de Tierras y Aguas del Ministerio del Ambiente; y Ana Patricia Ossers, directora jurídica de la organización, fueron designadas para revisar los últimos cambios propuestos por diversas organizaciones y organizaciones de la sociedad civil.
Cuando se le preguntó (en octubre de 2023) por qué crear una ley de aguas y no un código, Ossers explicó que en una propuesta presentada en 2020 se decidió que para que pueda convertirse en ley aplicable, debe ser una ley más simple. se excluye todo lo relacionado con la regulación de servicios y se deja atrás la regulación de recursos. Es por este motivo que se abandonó el código de país.
Contiene facturas de agua del gobierno. El proyecto de ley de agua del gobierno contiene una serie de aspectos que faltan en el marco legal actual (leyes 58-52), como los derechos de propiedad (otorgados a perpetuidad); y no existe un régimen de participación de los usuarios en la cuenca (no se mencionan consejos de cuenca ni consejos de agua). Esta ley aborda primero la cuestión de la fragmentación y establece una agencia nacional de gestión del agua responsable de los recursos y asigna la autoridad para regular los servicios a los respectivos sectores, como la generación de energía hidroeléctrica y el sector del agua.
y los sectores de higiene, industria y riesgos deben tener sus propias leyes especializadas. René Mateo dijo en octubre de 2023 que esta es una ley marco central orientada a gestionar el agua como recurso y no como servicio hídrico. Enfatizó que República Dominicana cuenta con 21 organizaciones que de una u otra manera desempeñan un papel protagónico en el sector agua, y la mayoría de las veces lo hacen sin planificación entre sí.
Él cree que este problema debe resolverse. Por su parte, Ana P. Ossers señaló que el proyecto del Gobierno tiene mejores y más estrictas regulaciones sobre el uso del recurso hídrico que el proyecto CD.