Después de varios días de calma, la violencia regresó a Puerto Príncipe el jueves. Los haitianos esperan el nombramiento de un consejo de transición presidencial el viernes después de la renuncia del controvertido primer ministro Ariel Henry, con cautelosas esperanzas de que la nueva administración estabilice un país devastado por la violencia de las pandillas. Después de varios días de calma, la violencia continuó el jueves en Puerto Príncipe.
Según un periodista de la AFP, en dos calles principales del centro de la capital, la gente levantó barricadas para protegerse de los ataques de las bandas, pero también como señal de protesta. Un día antes, se produjeron disparos en el aeropuerto de la ciudad, lo que dejó un agente de policía herido y la residencia del director general de la policía fue saqueada e incendiada, según un sindicato policial. Las autoridades ampliaron hasta el domingo el toque de queda nocturno en la región occidental, incluido Puerto Príncipe, para intentar recuperar el control de la situación.
La región se encuentra bajo estado de emergencia hasta el 3 de abril, pero ambas medidas no han logrado contener a las poderosas bandas que controlan el 80% de la capital. Hay muchos fugitivos de prisión en las calles. La situación siguió empeorando.
La decisión de declarar el estado de emergencia en Haití con un toque de queda de un mes es loable (…), pero no debería ser así, expresó su decepción Edner Petit, residente en Puerto Príncipe. Desde principios de mes, la capital ha sufrido numerosos ataques por parte de bandas que se han agrupado para desafiar al primer ministro Henry. El líder, en el poder desde el asesinato del presidente Jovenel Moïse en 2021, anunció su dimisión en la madrugada del martes tras días de presiones internacionales y locales.
Según la propuesta supervisada por la Comunidad del Caribe (Caricom), un consejo presidencial de transición gobernaría el país hasta que se celebren nuevas elecciones. El grupo tendrá siete miembros votantes, que representarán a las principales fuerzas políticas del país y al sector privado. Una vez establecido, tendrá que elegir un primer ministro interino y nombrar un gobierno en pleno.
Varios partidos electos han enviado los nombres de sus representantes a Caricom, indicaron a la AFP varias fuentes. Inicialmente, los integrantes del Colectivo 21 de Diciembre, el grupo de Ariel Henry, no se pusieron de acuerdo en un solo representante y designaron a tres personas. Sin embargo, según fuentes cercanas a las negociaciones, se está discutiendo para encontrar un candidato de consenso.
Mientras esperaba que progresara la transición política, Haití sufrió frecuentes disturbios. Y la delegación internacional supervisada por Naciones Unidas, junto con la policía keniana, suspendió su intervención hasta la formación de una nueva administración. Por su parte, el pueblo debe asumir las consecuencias de la violencia ocurrida.
Samantha Powers, directora de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), afirmó este viernes que al menos 362.000 personas se encuentran desplazadas y 5,5 millones de personas necesitan asistencia humanitaria inmediata en el país caribeño. La organización ha prometido 25 millones de dólares en ayuda humanitaria, que se sumarán a la cifra de 33 millones de dólares anunciada hace unos días por el jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken. Estos fondos se utilizarán para ayudar a las Naciones Unidas y a las ONG a proporcionar alimentos, atención médica y agua potable.
Las Naciones Unidas también están trabajando para establecer un puente aéreo desde la vecina República Dominicana para facilitar la entrega de ayuda humanitaria.