La mañana de este Sábado Santo, la concurrida playa de Boca Chica aún tenía algunas mesas vacías, pero con el paso de las horas, la gente comenzó a congregarse en esta zona. Feliz Marínez, quien vino desde Villa Mella, dijo que su intención hoy era estar tranquilo con su familia y eligió esta playa porque estaba cerca de su residencia. Mientras que Novel Rodríguez, quien se sentó en su mesa y estuvo a punto de contratar el servicio de catering, dijo que los precios son razonables y el pescado es variado según el tipo que se quiera consumir.
Generalmente en este día el precio aumenta un poco, pero se puede comprar gracias a Dios, dijo Rodríguez. A José Rosario, vendedor de pescados, jugos y otros alimentos de la zona, la gente se le acercó para decir que hasta el momento de la entrevista había atendido a unas 10 personas a las que les había vendido pescado. Ha sido un poco lento, pero el progreso se ha producido principalmente en horas, dijo Rosario.
Operativo y seguro En la zona se llevan a cabo actividades como torneos de voleibol y dominó. Mientras tanto, en la playa de Boca Chica se encuentran apostadas diversas autoridades, entre ellas el Politburó y miembros de la Policía Nacional, así como personal médico de la Cruz Roja. Alexander Santa, que trabaja en el sitio de la Cruz Roja, explica que hasta el momento el único problema encontrado es una intoxicación leve al ingerir alimentos.
