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Ataque con drones reaviva temores de desastre nuclear en la central eléctrica de Zaporizhzhia en Ucrania

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Por ello, la Agencia Internacional de Energía Atómica (OIEA) ha pedido a ambas partes que eviten un accidente nuclear importante.

Rusia acusa a Estados Unidos de reclutar prisioneros mexicanos y colombianos para luchar en Ucrania Rusos y ucranianos se acusan mutuamente de estar detrás de un ataque con drones ocurrido en los últimos días en la central nuclear de Zaporizhzhia, que dejó un muerto y tres heridos. Por ello, la Agencia Internacional de Energía Atómica (OIEA) ha pedido a ambas partes que eviten un accidente nuclear importante. MIRAR: Rusia denuncia el ataque con drones de Ucrania a la central nuclear de Zaporizhzhia La central nuclear de Zaporizhzhia, la más grande de Europa, está situada en el frente sur de Ucrania y está prácticamente bajo control ruso desde el inicio de la invasión militar en febrero de 2022.

A pesar de los repetidos esfuerzos de las fuerzas de Kiev, la planta no pudo reactivarse y sus seis reactores han sido cerrados desde que se rompió el depósito que suministraba el agua necesaria para la refrigeración, cancelado en 2023. La portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, María Zakharova, atribuyó el ataque a las fuerzas ucranianas y llamó a la comunidad internacional a comprender y reaccionar ante el acto de terrorismo nuclear llevado a cabo por el régimen de Kiev. Por su parte, el Gobierno ucraniano reaccionó a través del portavoz de inteligencia militar, Andrí Yúsov, quien aseguró que los rusos simularon un ataque a la planta.

Además, también reiteró que las fuerzas rusas mantienen tropas y minas en la planta, lo que pone en peligro la infraestructura nuclear y a los civiles de la zona. La autoría del ataque es algo extraña. En principio, esto no conviene a Rusia, ya que controla la planta y buscará ponerla en funcionamiento en algún momento para satisfacer sus necesidades energéticas.

Del lado ucraniano, esto tampoco les conviene, ya que esperan recuperarlo para integrarlo a la red eléctrica del país, explicó a El Comercio el analista internacional Roberto Heimovits. Por su parte, la OIEA describió el ataque como un incidente grave que tenía el potencial de comprometer la integridad del sistema de contención del reactor; Sin embargo, aseguraron que los daños no afectaron la seguridad nuclear. Aun así, el director general de la agencia nuclear, Rafael Grossi, advirtió que al menos tres disparos impactaron en la estructura de contención del reactor, por lo que llamó enérgicamente a los militares a moderar todas las acciones que violen principios básicos.

proteger las instalaciones nucleares. Cualquier ataque a una central nuclear es sumamente irresponsable por los daños que podría causar. Heimovits explica: Lo primero que me viene a la mente es lo que ocurrió en Chernóbil en 1986, pero sobre todo lo que habría sucedido si no se hubieran hecho esfuerzos tan enormes para limitar los daños.

En mayo de 2023, tras encabezar una delegación en la que participó el propio Grossi, la OIEA informó al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas que Rusia y Ucrania deben respetar cinco principios clave para evitar un desastre nuclear en Zaporizhzhia. Lo ocurrido el domingo 7 violó claramente los acuerdos alcanzados el año pasado, por lo que está por ver cómo actuará la organización en el futuro. Heimovits dijo que lo mínimo que haría la OIEA entonces, más allá de pedir el cese de los ataques, es enviar una delegación para verificar los daños a la planta y descartar cualquier riesgo de fuga, por pequeña que sea.

Según este experto, el desastre que podría provocar una explosión o fuga en Zaporizhzhia sería equivalente a lo ocurrido en Chernóbil, durante el periodo soviético, y se vería agravado por la diferencia entre las capacidades de respuesta existentes en la Unión Soviética en aquel momento. . esta vez y lo que Rusia o Ucrania tendrían ahora en guerra.

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