Ginebra.- Un equipo de ingenieros de la Ecole Polytechnique Fédérale de Lausanne (EPFL) ha desarrollado una tinta a base de polímeros elásticos (elastómeros) capaces de imprimir objetos 3D con propiedades materiales variables y sin necesidad de uniones mecánicas en su composición. La impresión 3D, utilizada en campos como la robótica o la industria aeroespacial, es una tecnología que permite la creación de objetos tridimensionales a partir de modelos digitales, depositando sucesivas capas de materiales como el elastómero. Se pueden fabricar con una variedad de propiedades, desde duras hasta elásticas, lo que los convierte en un material muy popular para este tipo de aplicaciones.
Sin embargo, la producción de elastómeros a los que se les pueda dar forma de estructuras tridimensionales capaces de cambiar su composición de flexible a rígida no ha sido factible hasta ahora. La líder de investigación y directora del Laboratorio de Materiales Blandos de la EPFL, Esther Amstad, añadió en el comunicado de prensa que los elastómeros a menudo se moldean de tal manera que su composición no puede cambiar en las tres dimensiones mencionadas anteriormente. Para resolver este problema, un equipo liderado por Amstad desarrolló un elastómero granular de doble red imprimible en 3D llamado DNGE, que puede cambiar sus propiedades mecánicas de una manera sin precedentes.
La versatilidad de estos elastómeros radica en su composición, con la red principal de micropartículas de elastómero hinchadas formadas por gotitas de emulsión de aceite en agua, que se añaden a la tinta de impresión 3D para crear la textura deseada del objeto. Cuando estos elastómeros son absorbidos, se crea una segunda red que le da rigidez al objeto. Luego, utilizando estos elastómeros, los ingenieros imprimieron un prototipo de dedo humano con huesos duros rodeados de carne flexible capaz de deformarse de maneras predeterminadas, demostrando así el potencial de esta nueva tecnología.
El descubrimiento, publicado en la revista Advanced Materials, revisada por pares, también da como resultado una mayor durabilidad de las impresiones 3D, ya que el uso de elastómeros en lugar de hidrogeles (un material utilizado en investigaciones recientes en este campo) permite crear estructuras. que no requieren agua. haciéndolos más estables en el tiempo.
Además, los investigadores señalan que otra ventaja es que los elastómeros del tipo DNGE se pueden imprimir utilizando impresoras 3D disponibles en el mercado, por lo que cualquier persona que tenga una impresora estándar de este tipo puede imprimirlos. Respecto a futuras aplicaciones de este avance, el equipo destaca que podría ser útil para la producción de dispositivos que ayuden en la rehabilitación de pacientes con pérdida parcial o total de movilidad, así como para crear prótesis o incluso guías de movimiento para ayudar a los cirujanos. procedimientos médicos.