Washington.- El presidente estadounidense, Joe Biden, advirtió este jueves al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, que el futuro apoyo de Estados Unidos a Israel en la guerra en Gaza dependerá de la rápida implementación de nuevas medidas para proteger a los civiles y a los trabajadores humanitarios. La llamada telefónica de aproximadamente 30 minutos entre Biden y Netanyahu, pocos días después de un ataque israelí que mató a siete trabajadores humanitarios en la Franja de Gaza, enturbió aún más la ya tensa relación entre los dos líderes. El mensaje de Biden representa un cambio importante en el apoyo de su gobierno a la campaña de guerra de Israel y por primera vez, el presidente estadounidense ha amenazado con repensar su apoyo si el gobierno israelí no cambia de estrategia y no autoriza más ayuda humanitaria a Gaza.
La Casa Blanca no especificó qué cambios podrían realizarse en la política de Washington, pero podrían incluir cambios en la venta de armas a Israel. Los funcionarios de la administración dijeron que esperaban que Israel hiciera un anuncio sobre los próximos pasos en cuestión de horas o días y que luego Estados Unidos evaluaría si las acciones de Israel fueron lo suficientemente lejos. La Casa Blanca dijo en un comunicado de prensa después de la llamada: Biden expresó claramente la necesidad de que Israel anuncie e implemente una serie de medidas específicas, concretas y mensurables para abordar el trauma, el daño civil, el sufrimiento humanitario y la seguridad de los trabajadores humanitarios.
El Presidente ha dejado claro que la política de Estados Unidos hacia Gaza estará determinada por nuestra evaluación de la acción inmediata de Israel sobre estas medidas. Biden también dijo a Netanyahu que era necesario un alto el fuego inmediato y pidió a Israel que llegue a tal acuerdo de inmediato, dijo la Casa Blanca, calificando el llamado de “directo” y sencillo. Hasta el momento no ha habido respuesta del gobierno israelí.
Mientras tanto, World Central Kitchen, un grupo fundado por el chef José Andrés que tiene como objetivo proporcionar alimentos inmediatos a las zonas de desastre, ha pedido una investigación independiente sobre los ataques israelíes que dejaron muertos a sus empleados, incluido un ciudadano estadounidense. La Casa Blanca dijo que no tiene planes de realizar su propia investigación. Por otro lado, el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, dijo a los periodistas en Bruselas que el apoyo estadounidense disminuirá si Israel no hace ajustes significativos en la forma en que conduce la guerra.
‘Si no vemos los cambios necesarios, habrá cambios en nuestras políticas’, afirmó. El portavoz de seguridad nacional de la Casa Blanca, John Kirby, también pidió a Israel que realice cambios claros y específicos, además de reiterar su antiguo llamado a que se proporcione más ayuda a Gaza. Si no hay cambios en sus políticas en la forma en que abordan las cosas, entonces tendrá que haber cambios en nuestras políticas”, dijo Kirby.
Hay mucho que hacer. Murieron demasiados civiles. Exigir que Israel ponga fin al creciente conflicto en todos los aspectos políticos.
El expresidente estadounidense Donald Trump, presunto candidato presidencial republicano, dijo el jueves que Israel estaba perdiendo completamente la guerra de relaciones públicas y pidió una solución al derramamiento de sangre. Resolvamos esto, volvamos a la paz y dejemos de matar gente. Y es una declaración muy simple, dijo Trump al comentarista de radio conservador Hugh Hewitt.
Tienen que hacerlo. Terminemos con esto rápidamente porque necesitamos… es necesario volver a la normalidad y a la paz.
