Miles de haitianos todavía venden productos y mercancías en las calles de RD hasta el día de hoy. Hasta el mediodía, el Gobierno aún no había respondido a las exigencias de Amnistía Internacional, que pedía el fin de presuntas violaciones de derechos humanos de haitianos, haitianos dominicanos y negros en la aplicación de una política migratoria que la organización califica de racista. .
El Nacional intenta desde la madrugada de este miércoles conocer la postura del Gobierno central y las autoridades competentes a quienes se les comunicará la carta. Homero Figueroa, director de estrategia y comunicaciones presidenciales; Antoliano Peralta, asesor jurídico de la Fiscalía; Daniel García Archibald, director de prensa presidencial; Jesús Vásquez -Chu-, ministro del Interior y Policía, y el ministro de Relaciones Exteriores, Roberto Álvarez, fueron contactados telefónicamente, pero ninguno de los dos planteó el tema. El Defensor del Pueblo, Pablo Ulloa, dijo esta mañana no haber recibido ninguna carta ni información de ningún organismo internacional sobre la violación de los derechos de los ciudadanos detenidos y deportados por las autoridades dominicanas.
Quizás le interese leer: Amnistía Internacional pide a República Dominicana dejar de deportar haitianos El mediador está abierto a todos los ciudadanos dominicanos; Pero lo mismo ocurre con cualquier organización o individuo que sienta que sus derechos han sido violados, añadió. Somos conscientes de la difícil situación que vive el pueblo haitiano; Agregó que siempre hemos apoyado una solución haitiana a la grave crisis que viven y que tantas vidas se ha cobrado. “Declaramos claramente que República Dominicana tiene derecho a llevar a cabo su política migratoria y que ninguna autoridad puede establecer lineamientos para un país y que la constitución dicta cómo llevar a cabo sus leyes”, dijo.
El propio gobierno dominicano informó haber deportado a más de 250.000 haitianos en 2023, incluidos aquellos con necesidad de protección internacional, a propósito de esta carta abierta, dijo la directora para las Américas de Amnistía Internacional, Ana Piquer. Estas deportaciones masivas constituyen una flagrante violación de las obligaciones internacionales de la República Dominicana, poniendo en peligro la vida y los derechos de estas personas. Destacó que el retorno forzoso a Haití debe cesar.
Piquer agregó que la drástica decisión del gobierno de suspender todas las medidas legales que permitían a los haitianos trabajar, estudiar o residir en el país ha tenido importantes consecuencias, afectando a familias ahora separadas y dejando a muchas personas en un estado de incertidumbre sobre el tema migratorio. La carta enfatiza que la exclusión de haitianos y dominicanos negros es el resultado de una serie de políticas migratorias discriminatorias, principalmente la detención y deportación masiva de haitianos, incluidos menores, adolescentes, mujeres embarazadas y en posparto.