Nueva York/Washington, 29 abr (EFE).- Cientos de estudiantes en decenas de universidades de Estados Unidos continúan desafiando al gobierno de Joe Biden y las autoridades de centros educativos en protestas contra la guerra en Gaza. El punto común de las protestas es rechazar la política estadounidense hacia Israel y exigir a los centros educativos que corten vínculos con el gobierno y el sector privado israelí. Este lunes, manifestantes de la Universidad de Columbia en Nueva York y la Universidad de Texas (UT) en Austin se negaron a cumplir las órdenes de expulsión emitidas por los dirigentes de dichas instituciones.
Docenas de agentes antidisturbios de la Policía Estatal de Texas ingresaron hoy al campus de UT y desalojaron el campamento por la fuerza. En videos compartidos en redes sociales por estudiantes y medios locales, podemos ver a personas llevándose a algunos estudiantes, incluso arrastrando a algunos por el césped. La policía también retiró las tiendas de campaña y las mesas que los manifestantes habían instalado en uno de los espacios verdes de la universidad.
Según los medios locales, al menos 50 estudiantes fueron arrestados tras la intervención de la policía. Esta es la segunda vez que las fuerzas del orden se enfrentan con estudiantes de UT desde el miércoles pasado, cuando la policía dispersó el campamento y arrestó a 57 personas. Según medios locales, entre los arrestados se encuentra el fotoperiodista de Fox Carlos Sánchez, quien enfrenta cargos federales por agredir a un policía.
En la prestigiosa Universidad de Columbia de Nueva York, los manifestantes de la universidad también se negaron a desmantelar el campamento que habían mantenido en el campus durante dos semanas, a pesar del ultimátum del centro educativo de hoy de que perderán las sesiones de clases durante el semestre. Uno de los portavoces de la protesta encargado de las negociaciones con la universidad dijo en una conferencia de prensa desde el campus que aunque las conversaciones iban por buen camino, las autoridades las habían detenido debido a la amenaza de suspensión. Este lunes, la universidad envió un mensaje de texto a los estudiantes dándoles hasta las 14.00 hora local (18.00 GMT) o corren el riesgo de ser suspendidos y no poder terminar el año.
Según los estudiantes, estas amenazas significan que los estudiantes que decidan quedarse enfrentarán suspensiones temporales, perderán el acceso a la vivienda, perderán el acceso al campus, perderán el acceso a la atención médica en el campus e incluso perderán los derechos de visa si son extranjeros. . Actualmente la policía se encuentra fuera del campus, pero en los últimos días arrestó a unas 100 personas.
Los universitarios, que llevan cinco días negociando con la administración, hicieron varias demandas, la principal que fue rechazada hoy fue que la Universidad de Columbia deje de invertir en empresas con intereses en Israel, mientras dure la guerra. Sin embargo, el presidente de la organización, el egipcio Minouche Shafik, confirmó este lunes que eso no sucederá. Por su parte, la Casa Blanca señaló este lunes que si bien el presidente Joe Biden apoya el derecho a protestar pacíficamente, también se opone a cualquier retórica violenta, a las amenazas de odio (…
) y al antisemitismo. La portavoz de la administración Biden, Karine Jean-Pierre, destacó durante una conferencia de prensa en Washington que era importante decir que no hay lugar para el antisemitismo en las universidades ni en ningún otro lugar de Estados Unidos. El portavoz también señaló que el gobierno considera a las universidades responsables de tomar sus propias decisiones y se negó a comentar sobre la decisión de la universidad de expulsar por la fuerza a los manifestantes.
