EFE.- Los medicamentos contra la obesidad han supuesto una auténtica revolución por su eficacia y son objeto de investigación no sólo en el campo sino también entre otros, en la enfermedad de Parkinson, la segunda enfermedad neurodegenerativa más común, que hoy se celebra como el Día Mundial. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la incidencia de la enfermedad de Parkinson se ha duplicado en los últimos 25 años, y las estimaciones mundiales en 2019 sugieren una cifra de más de 8,5 millones de personas con esta afección, y la Fundación Parkinson, se estableció en el Estados Unidos. Estados Unidos en 2016, el número de personas afectadas en todo el planeta alcanzó los 10 millones.
Un estudio final, publicado el 3 de marzo en el New England Journal of Medicine, mostró que los participantes en un ensayo clínico de fase II recibieron el fármaco lixisenatida, un análogo del GLP-1 (fármaco utilizado para el control glucémico y no basado en insulina), demostró Discapacidad motora menos progresiva. Sin embargo, el estudio concluyó que se necesitan ensayos más grandes y prolongados para determinar los efectos y la seguridad de la lixisenatida en personas con enfermedad de Parkinson. La lixisenatida ha demostrado propiedades neuroprotectoras en un modelo de ratón de la enfermedad de Parkinson, y esta no es la primera vez que estos fármacos han respondido favorablemente a esta patología o contra la enfermedad de Alzheimer actuando sobre la inflamación del cerebro.
El coordinador del Grupo de Investigación en Trastornos del Movimiento de la Sociedad Española de Neurología (SEN), Álvaro Sánchez Ferro, asegura, en declaraciones a EFE, que se trata de una información conocida y las investigaciones confirman que se puede modificar. un poco sobre la progresión de la enfermedad. El efecto encontrado no fue grande, pero confirma en cierto modo que se trata de una vía que podría ser interesante en la medida en que, en un tratamiento modificador de la enfermedad, esto simplifica significativamente la interpretación, destacó el neurocientífico SEN en Le Monde.
Día del Parkinson. El experto destacó que durante el período de estudio se observó un pequeño cambio de insuficiente significación clínica, por lo que es necesario ver si este efecto positivo se manifiesta con el tiempo, se mantiene o no. Por ejemplo, señala que en el futuro será necesario estudiar si los efectos se prolongan más allá de los 24 meses, de modo que el grupo placebo siga empeorando respecto al grupo fármaco, para que luego comience el efecto.
más significativo. importante y si aumenta con el tiempo, puede ser incluso de mayor preocupación clínica. Pero como dije, es un resultado positivo preliminar interesante, destacó el neurólogo.