Puerto Príncipe (EFE).- Un decreto designa a Michel Patrick Boisvert como primer ministro interino de Haití, a la espera de que el Consejo Presidencial de Transición que quedó instalado este jueves, forme un nuevo Gobierno.
Antes de su designación en el documento, fechado el 24 de abril y hecho público este jueves, el flamante primer ministro interino Michel Patrick Boisvert fue ministro de Economía y Finanzas desde el 5 de marzo de 2020 hasta la fecha, como parte del Gobierno dirigido por Ariel Henry, quien renunció a su cargo la víspera.
Michel Patrick Boisvert ha desarrollado una larga y distinguida carrera en el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), donde trabajó durante muchos años, primero en la Oficina de Distrito de Petit-Goâve, donde nació, como director Departamental Oeste, de 1995 a 2010.
A continuación, fue nombrado director de la Inspección Fiscal, cargo que ostentó de 2010 a 2018, en un contexto político cada vez más tumultuoso, llegando a la Dirección General de la institución de 2018 a 2020.
Antes de iniciar su carrera en el Ministerio de Economía, Boisvert estuvo contratado en la Dirección de Estudios Económicos del Banco de la República de Haití (BRH), entre 1991 y 1995.
En cuanto a su formación, tiene una licenciatura en Ciencias Contables por la Universidad de Puerto Príncipe (IGC) y un diploma en Economía por la Facultad de Derecho y Economía (FDSE) de la Universidad Estatal de Haití (UEH), también posee un máster en gestión de la política económica por la Universidad de Auvernia (Francia) en el Centro de Estudios e Investigaciones sobre el Desarrollo Internacional (CERDI).
Boisvert ejercerá el cargo hasta que el Consejo Presidencial de Transición, cuyos miembros fueron juramentados este jueves, elija a un nuevo primer ministro que se encargará de formar un nuevo Gobierno que conduzca al país hacia la celebración de elecciones con vistas a la investidura de un nuevo presidente el 7 de febrero de 2026.
La instalación del Consejo Presidencial de Transición es el primer paso hacia la creación de nuevas instituciones que ayuden a superar la crisis que sufre Haití, al menos a nivel institucional, pero por el momento no se ha conseguido reducir los niveles de violencia que ejercen las bandas, a la espera de la llegada de la misión multinacional autorizada por la ONU, que todavía no ve la luz por la falta de financiación internacional.