Jerusalén (EFE).- Al menos 60 gazatíes han muerto en la Franja de Gaza, tras una noche de bombardeos en la localidad de Rafah y el norte de Gaza, con un ataque terrestre en la zona de Zeitun. En Rafah, donde el ejército israelí lanzó su ofensiva el pasado martes, al menos ocho personas murieron, entre ellas tres niños, en un bombardeo contra una casa en el oeste de la ciudad. Aviones israelíes atacaron nuevamente la zona alrededor del paso fronterizo de Rafah, que permanecía cerrado, disparando balas hacia los barrios orientales de Al Shuweika y Al Jeneina.
Mientras tanto, la marina también utilizó ametralladoras para atacar la zona occidental de la ciudad. Según estimaciones de la agencia de seguridad de las Naciones Unidas para los refugiados palestinos (UNRWA), desde que el ejército israelí ordenó a los habitantes de Gaza en el este de Rafah que se desplazaran hacia el norte el 6 de mayo, unas 80.000 personas habían huido de su único escondite. Los costos para estas familias son insoportables.
Esta organización denunció que ningún lugar es seguro y reiteró la necesidad de un alto el fuego. Según testimonios de EFE, para muchos gazatíes obligados a evacuar Rafah, este era el tercer o cuarto desplazamiento forzado en estos siete meses de guerra. El portavoz de UNICEF, James Elder, dijo que Rafah es una ciudad de niños durante una conferencia de prensa en Ginebra el martes.
