Washington – Estados Unidos confirmó el jueves que todavía tiene a Cuba en la lista de países patrocinadores del terrorismo a pesar de que ayer admitieron que cooperan con la isla en una serie de operaciones antiterroristas. ‘Podemos cooperar en la lucha contra el terrorismo, pero todavía creemos que hay acciones que apoyan las actividades terroristas’, explicó en una rueda de prensa el portavoz adjunto del Departamento de Estado, Vedant Patel. Patel no quiso responder a la pregunta de qué acciones específicas debe tomar Cuba para salir de la lista de países que promueven el terrorismo, que fue introducida en 2021 y que implica una serie de sanciones económicas contra la isla.
La administración de Joe Biden aún mantiene a Cuba en esta lista, aunque ayer la sacó de otra lista, la de países que no cooperan plenamente en los esfuerzos antiterroristas (NFCC, por inglés). Washington y La Habana reanudaron la cooperación policial en 2023, incluso en la lucha contra el terrorismo, por lo que el Departamento de Estado determinó que ya no era apropiado seguir certificando a Cuba como un país que no coopera plenamente. El gobierno cubano dijo este miércoles que la decisión era insuficiente y pidió a Estados Unidos dar el siguiente paso y eliminar permanentemente a la isla de su lista de Estados patrocinadores del terrorismo.
La inclusión de Cuba en la lista estadounidense en enero de 2021 fue una de las últimas decisiones tomadas por la administración del republicano Donald Trump (2017-2021) antes de dejar el poder. Estados Unidos justificó posteriormente la medida haciendo referencia a la presencia en la isla de miembros de la guerrilla colombiana del Ejército de Liberación Nacional (ELN), que habían llegado a La Habana para llevar a cabo negociaciones de paz con el gobierno colombiano. En agosto de 2022 y por orden del presidente colombiano Gustavo Petro, la Fiscalía General de Colombia suspendió las órdenes de arresto contra 17 comandantes del ELN, incluidos aquellos cuya extradición solicitó Cuba.
Para designar a un país como patrocinador del terrorismo, la ley estadounidense exige que el Secretario de Estado determine que el gobierno estadounidense ha brindado apoyo repetidamente a grupos terroristas.