Miami. — Como los legisladores no lograron ponerse de acuerdo sobre la reforma migratoria o cuánto dinero asignar, los centros de detención de inmigrantes en Estados Unidos estaban tan sobresaturados que, a finales de 2023, comenzaron a liberar a los solicitantes de asilo que ingresaban a Estados Unidos. Allí no hay lugar para un alfiler, dijo a EL UNIVERSAL un migrante que no quiso ser identificado y tuvo la suerte de ser liberado.
En febrero, se revelaron presuntos planes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) para liberar a migrantes y reducir el hacinamiento en los centros de detención, debido a los déficits presupuestarios que enfrentaban y al estancamiento del debate sobre la asignación de fondos adicionales. Entre las caravanas que no se detienen y el número de migrantes que se acumulan en el lado mexicano de la frontera, una vez que finalice el Título 42, la patrulla fronteriza ya no puede simplemente expulsar a los migrantes detenidos. El perito abogado José Jordán dijo al diario que debía iniciar un trámite de deportación.
Pero entre los que seguían entrando sin documentos y los demás detenidos que ya estaban dentro, por supuesto no había más espacio; Están hacinados y eso genera otros problemas, explicó el abogado. Según un informe consultado por ICE, la Patrulla Fronteriza (BP) liberó a un promedio de 1.800.000 migrantes a Estados Unidos entre los años fiscales 2021 y 2023; Más del 50% de esta cifra se realizará en 2023, con 909.450 inmigrantes. Lea también: Administración Biden propone negar asilo a migrantes que amenacen la seguridad Lo que vi en las dos cárceles de inmigración donde estuve en Texas fue tanta gente, casi una encima de la otra.
No dormimos bien y tenemos dificultad para respirar a causa de los malos olores; Hay personas que orinan allí porque son desobedientes o porque tardan mucho en ir al baño, dijo a este diario un inmigrante indocumentado liberado. Había gente enferma y hacía mucho frío; El trato es malo. No se lo deseo a nadie porque no hemos cometido ningún delito”, afirmó.
Entre los estados estadounidenses con centros de detención de inmigrantes más afectados por el hacinamiento se encuentran Texas y Arizona. Un ejemplo es El Río, Texas, que incluye Eagle Pass, uno de los lugares fronterizos para indocumentados más espectaculares; Aquí, la prisión tiene una capacidad para 2.000 personas, pero a finales de 2023 habrá 5.200 personas detenidas; 256% de capacidad.
