Tecnologia

Violencia digital entre parejas íntimas, ilimitada en el tiempo y el espacio

caruri 1313.png
caruri 1313.png
CIUDAD DE MÉXICO/SemMéxico.- La violencia digital no es menos peligrosa que otras formas de agresión y abuso de la tradición.

CIUDAD DE MÉXICO/SemMéxico.- La violencia digital no es menos peligrosa que otras formas de agresión y abuso de la tradición. Estudios demuestran que su prevalencia en el mundo es de hasta el 73%, es decir, 7 de cada 10 personas la padecen, advierte la profesora del Departamento de Psicología de la UNAM, Claudia Jaén Cortés. El fenómeno tiene un mayor impacto en las mujeres y en los grupos vulnerables, añadió la investigadora.

No existen restricciones geográficas para su realización y se puede realizar en cualquier momento y en cualquier espacio. Durante la conferencia sobre violencia digital en las relaciones sentimentales, reiteró que a diferencia de la violencia que se comete cara a cara, ésta puede realizarse en público o en privado a través del ciberespacio. Para ello, sólo necesitamos interactuar en los teléfonos móviles.

Afirma con razón que se incluyen conductas que pueden resultar amenazantes, negligentes, acosadoras y abusivas, cuyo objetivo es controlar, perjudicar y perjudicar a una pareja o ex pareja, mediante el uso de recursos electrónicos. Esto incluye insultos, humillaciones, difusión de información personal, robo de identidad, invasión de la privacidad y vigilancia, así como chantaje y pornografía no consentida, violencia financiera en línea o ciberacoso. Los abusadores están detrás de computadoras y teléfonos celulares y tienden a controlar todos los aspectos de la vida de su pareja.

Le pidieron que enviara su ubicación y le seguían preguntando qué estaba haciendo y con quién estaba, lo atacaron incluso después de que terminó la relación. Jaén Cortés continúa: Parecen omnipotentes y omnipresentes, tienen acceso constante a la vida cotidiana de sus destinatarios, tienden a arruinar su reputación y darles una sensación de inseguridad. Al referirse a algunos casos de violencia digital, enfatizó que en psicología se han identificado situaciones como: bloqueo de redes sociales, sin importar el tiempo de relación; recibir insultos y críticas a través de éstos; y evitar responder mensajes.

Como parte de las actividades de vigilancia y control, se requieren contraseñas o ubicaciones de las parejas y se examinan sin permiso las cuentas de las plataformas digitales en las que participan; o se realiza un seguimiento de sus actividades: ¿por qué le gustaría tal cosa? Otro ejemplo relacional es pedir a la pareja que se aleje de determinadas personas por celos o inseguridad; Explicó que ciertos contactos estaban prohibidos y disipó falsos rumores entre amigos. Al mismo tiempo, la violencia sexual en los medios digitales incluye la coerción y el acoso, el uso de mensajes de texto e imágenes sexualmente explícitos (como la distribución de fotografías o vídeos) de producción propia y enviados o recibidos a través del teléfono móvil o Internet.

Este tipo de pareja digital puede provocar un sinfín de emociones negativas, como ira, tristeza o rabia. Entre sus consecuencias más comunes se encuentran la depresión, la ansiedad, el aislamiento social, la mala reputación, las conductas sexuales de riesgo e incluso el trastorno de estrés postraumático. Asimismo, la productividad es baja; aprendizaje lento y abandono escolar; problemas de salud crónicos (con enfermedades como colitis o gastritis); discapacidades; días de trabajo perdidos; autolesiones; relaciones interpersonales disfuncionales; la enfermedad se acompaña de otros problemas de salud mental, como ideas y comportamientos suicidas, hasta la muerte.

Si alguien se encuentra en una situación de invasión digital, es importante pensar activamente en el futuro, tener un plan de vida, centrarse en sus objetivos y recordar que no podemos evitar depender de nuestra pareja. Jaén Cortés también recomienda acudir a instalaciones como centros de atención psicológica para recibir apoyo emocional y, en caso de ser necesario, emprender acciones legales contra el agresor. Para construir relaciones saludables, recomienda fortalecer las habilidades comunicativas, donde reine la escucha reflexiva, la asertividad y la empatía; utilizar estrategias de negociación; establecer límites y promover la justicia; implementar métodos de resolución de problemas y realizar un inventario de recursos (familia, universidad, etc.).

Asimismo, establecer una relación matrimonial basada en la equidad y la intimidad; reconoce tus propios privilegios y los de tu pareja; y saber que tenemos derecho a tomar decisiones sobre nuestro cuerpo y nuestra sexualidad, concluyó. AM.MX/fm

TRA Digital

GRATIS
VER