Cádiz (1973) Escritor y editor de tecnología. Redactando profesionalmente desde 2017 para blogs y medios en español.
Si usas un iPhone, puedes usar Face ID para bloquear el acceso a la aplicación WhatsApp. Esto añade una capa extra de seguridad y evitará que cualquier persona que conozca tu código de desbloqueo cotillee sobre lo que tienes en la aplicación más utilizada del mundo. Observe cómo hacer esto, es muy simple.
Si es un usuario habitual de la aplicación, será mejor que la proteja aún más. Especialmente si tu iPhone está dirigido a un familiar que conoce tu código de desbloqueo. Te mostraré cómo agregar este sistema de reconocimiento para que nadie vaya a donde no debe.
Lo primero que debes hacer después de abrir la aplicación es ir a la pestaña «Configuración», allí contiene el icono de engranaje. Una vez que esté allí, haga clic en la opción «Privacidad».
Después de hacer eso, en este menú encontrará la opción «Bloquear aplicaciones». Esto es lo que te permitirá aplicar el reconocimiento biométrico para abrir la aplicación. Haz clic en él.
Ahora encontrarás solo una opción, que es «Requerir Face ID», que es un interruptor que está deshabilitado de forma predeterminada. Tócalo y se activará, se pondrá verde.
Una vez hecho esto, podrás elegir cuándo quieres activar Face ID después de la última vez que usaste WhatsApp. Podrás elegir entre “Inmediatamente”, “Después de 1 minuto”, “Después de 15 minutos” o “Después de 1 hora”. Aquí tienes que ser tú quien decida qué momento es el más adecuado y tus circunstancias personales. Una vez que selecciones, los cambios se guardarán y la próxima vez que abras WhatsApp, tendrás que usar Face ID para acceder a la aplicación.
Este sistema no permite que nadie use tu cuenta de WhatsApp si conocen el código de desbloqueo porque Face ID es un sistema unipersonal. Por otro lado, no está de más cambiar constantemente el código de desbloqueo o no reemplazar el código habitual de 4 dígitos con un código de más de 6.
Ahora sabes cómo aplicar Face ID a tu aplicación WhatsApp para hacerla aún más segura. El reconocimiento biométrico pondrá a prueba la paciencia de los fisgones que quieren saber todo sobre la persona con la que estás hablando o con la persona con la que dejaste de hablar. Y nuevamente, rastrear el teléfono de otra persona es un delito y ha habido condenas por ello.
