Santa Cruz de Tenerife.- Las orcas que interactúan con los barcos en el Estrecho de Gibraltar no los atacan sino que juegan con ellos, según un estudio de la fundación para la conservación, información e investigación de crustáceos, en colaboración con Fundación Loro Parque.
Los cetáceos utilizan su nariz para empujar el timón de las velas de sus barcos, lo que provocaba daños en el barco, pero en casos raros terminaron en el rescate de los tripulantes.
Loro Parque Fundación, agregó la empresa, ha trabajado durante 20 años en la conservación, información e investigación de mamíferos marinos, explicando que no hay mucho que hacer en el océano. así que las orcas buscan entretenimiento en cualquier cosa y mientras tanto, un velero puede ser lo más emocionante que pase.
Javier Almunia, director de Loro Parque Fundación y experto en mamíferos marinos, asegura que así es. «parecía claro que había algo de interés o placer para ellos en un velero», como manejar el timón o soplar en el casco.
Así lo destaca en las imágenes obtenidas a través del trabajo en el plataforma, también se observó que, contrariamente a lo que se cree, no mordieron el timón sino que lo empujaron con el morro.
«Otro detalle que va en contra de la teoría de la agresión», dice Almunia, quien recuerda que esta actitud de las orcas en esta zona no es nueva y que se han comenzado a registrar interacciones con veleros recibidos en 2020.
Orcas Los protagonistas de estas interacciones pertenecen a una subpoblación conocida como Las orcas ibéricas y son una especie considerada vulnerable en la categoría de especies amenazadas de España debido, entre otras razones, a que su alimento, el atún rojo, ha ido en declive.
Cada año las orcas llegan después los bonitos entre los meses de mayo, junio, julio y agosto, finalizando el periodo normal de alimentación a finales del verano, cuando abandonan la zona.
El número de ejemplares presentes es variable y depende de la cría de cada uno grupo ese año, señala un comunicado de prensa de Loro Parque Fundación.
Es durante estos periodos cuando se producen los encuentros entre el barco y la orca. en el Estrecho de Gibraltar, una zona en forma de embudo con corrientes oceánicas que facilitan el movimiento de los animales marinos.
Estas corrientes oceánicas son las que utilizan los atunes para llegar a las zonas de reproducción cuando llegan a las aguas del estrecho, trayendo consigo a las orcas.
Para 2023, en cooperación con el estudio del Ministerio de Transición Ecológica y Retos Demográficos, se ha informado del etiquetado satelital de varios ejemplares de orca.
El prototipo del marcador, un sistema que se coloca en la aleta dorsal del animal, se ha desarrollado en fases de pruebas en Loro Parque, donde se ha probado su funcionalidad, comodidad para los animales y otras características básicas que se han probado. verificado, añadió. plataforma.
El siguiente paso es colocarlo sobre algunas orcas en el Estrecho de Gibraltar para mapear los movimientos y frecuencia de las orcas, para identificar áreas con instalaciones de riesgo y áreas con un mayor nivel de seguridad. . y permitir a los barcos elegir las rutas más seguras.
Todo ello, subraya la nota, tiene como objetivo crear una herramienta que ayude a solucionar o mitigar este problema.
Para los barcos, lo más recomendable es mantener o aumentar la velocidad, ya que se ha observado que después de 2 y 3 km las orcas pierden rápidamente el interés.
Dile Desde que publicaste el mapa, sigue los consejos de velocidad y selecciona En En las zonas recomendadas, las más cercanas a la costa, los encuentros por consecuencia han disminuido significativamente, con una reducción del 70% en el periodo 2023-2024. EFeverde