Tienen un plazo para entregar las llaves y abandonar el convento
La Iglesia católica ha dado diez Hasta quince días para que decenas de monjas en España retiren o ratifiquen su decisión de abandonar la Santa Sede para seguir a un falso obispo, lo que les llevaría a ser excomulgadas.
La fuente del arzobispo de Burgos, La provincia española donde se encuentra el monasterio de esta comunidad de clarisas, explicó este lunes a Efe que diez de quince religiosas deben responder ante un tribunal eclesiástico por acusaciones de cisma.
Las cinco restantes son las más antiguas y tienen No se ha hecho público, pero el resto hay que aclararlo uno a uno si ratifican su salida de la Iglesia católica, como anunciaron el 13 de mayo con su manifiesto de 70 páginas, o si se retiran, bueno, no se puede excomulgar a un grupo, pero la excomunión es personal.
El plazo es de quince días naturales desde el pasado viernes, salvo tres de ellos, que son diez.
Estas tres monjas, incluida la abadesa, firmó una denuncia contra el arzobispo Mario Iceta, acusándolo de abuso de poder, usurpación de representación legal y violación de la libertad de asociación.
La Santa Sede nombra al arzobispo comisionado pontificio, con plena autoridad sobre los conventos de estas monjas, que han declarado la tutela de la Cofradía Sancti Pauli Apostoli, que considera excomulgado a Pío.
De Rojas y el falso sacerdote José Ceacero se reúnen con monjas en el convento de Belorado, en el norte de España, a pesar de
El arzobispo también concedió un plazo de dos días, que expira este lunes, para que las Clarisas entregaran una copia de la llave del monasterio, pero no la exigió. abandonar el monasterio. monasterio..
En declaraciones a EFE, Ceacero, considerado portavoz de las monjas, enfatizó que ya no reconocen la autoridad del arzobispo, por lo que “no entregarán las llaves cerradas” y no comparecerán ante el tribunal eclesiástico, denunciando al mismo tiempo que su cuenta bancaria ha sido «bloqueada» por el arzobispo y que detrás de todo hay una «complot inmobiliaria» para usurpar su monasterio. la venta de un convento de estas monjas, famosa por sus chocolates, que la Iglesia rechazó por temor a que un comprador como De Rojas estuviera detrás de la venta y que acabó en los tribunales, exigiendo las monjas cerca de 1,6 millones de euros por la supuesta obra llevado a cabo.