Alguien, en mi interior, trató de explicarme que mis creencias sobre las enfermedades que aquejan a nuestra sociedad eran fundamentalmente erróneas, culpando de todo a la política de clases y ese no es el caso, aunque así sea. no permite que esto suceda.
De hecho, en el entrelazamiento de eventos y actividades Contra esta ley, siempre existe la influencia mágica de los políticos, ya sea en la forma o en el contenido.
Solo hay que ver el gran problema de la circulación y división de personas que se esconden en asociaciones formadas con el único fin de obtener beneficios o impunidad. Para entender esto, no es necesario decir claramente qué es un llamado sindicato, aunque para mayor claridad simplemente lo diremos.
El número de estos sindicatos en todo el país en el territorio Ya son innumerables, en los que, de hecho, en cada sector hay dos o tres agencias asignadas a la misma función, la misma agencia opera según sus propias reglas e intereses, pero no hay autoridad para detenerlas.
Son los padres pobres de estas familias, son estas personas las que actúan como carne de cañón o puestos de avanzada de la tribu, para que los líderes obtengan satisfacción personal sobre sus propios intereses y específicos.
Por ejemplo, bastaría con mencionar lo que está sucediendo en medio de nuestras interminables campañas electorales, donde los líderes de los horrores llamados públicos. Esta compañía utiliza a sus miembros como ovejas en un corral, mientras que el La fortuna de sus dirigentes aumenta en proporción inversa. a la pobreza de sus integrantes.
Es por eso que hoy en día existe la extorsión y la prepotencia por parte de estas personas fuera de control donde ningún gobierno se atreve a cobrar, llamar la atención y menos castigar a quienes violan las reglas de tránsito. , porque, inmediatamente, «respetable», En cualquier caso, con una apelación, liberará al violador y castigará al agente de la ley.
Así que de esta manera y en el caos civil que esto parece crear , y, hasta el día de hoy, gente estúpida y Esta sumisión sólo debe soportar la lucha y el caos criminal que crea esta situación.
Nosotros, aunque no queramos admitirlo, no solo estamos en la tierra este país, en medio de su guerra contra el libertinaje, se ha convertido en la ley, el garrote y la constitución, donde la templanza para combatirlo no es mera estupidez.
Encuéntranos, con situaciones bochornosas y hechos socialmente destructivos, al impedir cualquier aplicación de principios o normas que impidan las conductas irresponsables, vergonzosas y extravagantes de las que son ejemplos bastantes de actualidad, como el feminicidio y las conductas desenfrenadas que tenemos hoy.
Pero parece que nos hemos convertido en víctimas de un patrón de activismo para limitar nuestra capacidad de escuchar, incluso de oír, lo que nos ha llevado a un estado de impotencia en el que es difícil integrarnos pero que está presente. Y hay una nueva generación de formadores de opinión en los medios, algunos peores que sus mayores detractores, porque heredan el gobierno de sus antepasados, pero han ido mucho más allá de sus conocidas cualidades de arrogancia, manipulación y chantaje arrogante, y día tras día envenenan nuestra vida.
Pero la mala política aún prevalece en un mundo donde parece que nuestros líderes, -o la gran mayoría-, sufren de un sesgo de confirmación cada vez mayor, que incluso cuando los hechos ocurridos son tangibles. , tienden a buscar o interpretar información que confirme sus creencias, incluso si son muy diferentes de la realidad. Es tan simple como eso. ¡Sí señor!
«Una persona que tiene una razón para vivir puede soportar casi cualquier cosa.»
F. Nietzsche
