París – La estadounidense Katie Ledecky ha enviado un aviso a todos sus rivales y se enfrentará en la final de los 400 libres, una de las más anticipado de estos Juegos Olímpicos de París, después de nadar en la serie matutina con un tiempo de 4:02.19 minutos.
Muy lejos del 3:58.35 con el que Ledecky ganó las pruebas de selección de Estados Unidos el pasado mes de junio, pero suficiente para superar a la gran favorita de la serie anterior, la australiana Ariarne Titmus, quedó segunda con un tiempo de 4:02.46.
Un registro que demuestra claramente que la campeona oceánica, actual mundial y olímpica, saltó a la piscina de La Défense Arena de París con la clara intención de no gastar ni un solo gramo de energía más de lo necesario para clasificarse para la final de esta noche.
La prueba son siete segundos más de distancia. Titmus completó una vez la prueba con un récord mundial -3:55.38- que impuso en la final del Campeonato del Mundo de Fukuoka 2023.
De hecho, la nadadora australiana dominó la manga final hasta los 350 La ronda de metros pareció ser arrasada en el tramo final, donde Ledecky parecía más decidida a lograr la victoria.
La joven canadiense Summer McInstosh tampoco reveló todas sus cartas, tercera en la carrera por el medalla de oro en los 400 estilo libre, una carrera que muchos dudan en llamar «la carrera del siglo», después de cerrar la serie con un tiempo de 4:02.65 minutos.
El tiempo relegó a McIntosh, que en Con apenas 17 años, quedó segunda en la eliminatoria detrás de la neozelandesa Erika Fairweather (4:02.55) Podio en el que el británico Adam Peaty, como ocurrió en los Juegos Olímpicos de Río 2016 y Tokio 2020, parece listo para dar el primer paso, tras qué pasó en la sesión de clasificación matutina de los 100 braza.
Una serie en la que Peaty, que marcó un tiempo de 59,18 segundos, sólo fue superado por el holandés Caspar Corbeau, que se enfrentaría a los lideratos con el mejor tiempo en semifinales, tras nadar este sábado en 59.04.
Haiyang Qin de China, medallista de oro en 50, 100 y 200 braza en el Mundial de Fukuoka 2023, fue mucho más discreto, siendo limitada al tercer lugar en su serie con un tiempo de 59,58 segundos.
Reservada equivalente es la estadounidense Gretchen Walsh, actual plusmarquista general en los 100 mariposa, que terminó la serie de la mañana en cuarto lugar con un tiempo de 56,75 segundos, muy lejos del récord mundial -55,18-
La china Yufei Zhang, actual campeona olímpica, se mostró más activa, registrando el mejor tiempo de la serie con una marca de 56,50, un segundo y a media distancia de la canadiense Maggie Mac Neil, medallista de oro en los Juegos Olímpicos de Tokio, que se clasificó para las semifinales en 57,00 segundos.
El objetivo de las alemanas Martens por el oro
Por su parte, el corredor alemán Lukas Martens, que el pasado mes de abril se quedó a un 26 por ciento del legendario récord mundial de su compatriota Paul Biedermann, se confirma así como el favorito a ganar la medalla de oro en los 400 libres tras llegar a la final con el mejor tiempo. , 3:44.13 minutos.
Sin embargo, en la final del relevo 4×100 libre femenino, parecía que el destino le llegaría a Australia, que sin la salida habría tenido un segundo y medio más de ventaja que la Estados Unidos.
La lucha entre China se ha vuelto más equilibrada, con la participación del poseedor del récord mundial hectométrico Zhanle Pan, Australia y Estados Unidos. en la final masculina de relevos 4×100 libre, tras una serie en la que los asiáticos vencieron a australianos y estadounidenses por menos de un segundo. (EFE)
