Caracas, 31 jul (EFE).- El presidente venezolano, Nicolás Maduro, vinculó este miércoles con Héctor Guerrero Flores -alias ‘Niño Guerrero’-, líder de la transnacional La banda criminal «Tren de Aragua», cuyas protestas estallaron en las últimas horas contra los resultados electorales del domingo emitidos por el Consejo Nacional Electoral (CNE), que lo aprobó como presidente reelegido. «‘ El ‘Niño Guerrero’ es famoso en el sur de Caracas y dirige operaciones. Actualmente se encuentra en movimiento, tratando de huir a Colombia», dijo el presidente en una conferencia de prensa, en la que reiteró que en medio de las protestas se generó violencia. en algunas partes del país, como parte del golpe de Estado en su contra.
Aseguró que Estados Unidos envió a Guerrero a Venezuela para promover las protestas del gobierno que surgieron de manera espontánea, especialmente después de que la principal coalición opositora, el Partido Demócrata Unido El Partido Plataforma (PUD), aseguró que su candidato, Edmundo González Urrutia, ganó las elecciones por amplio margen.
«Lo enviaron desde Manizales (Colombia), porque los Gingos lo quebraron, le emitieron un decreto amenazándolo, declarando a su padre terrorista y le dijeron: vete a Venezuela, haz algo para salvarte”, dijo.
Líder chavista dice Guerrero, quien escapó de una prisión venezolana, re- Ingresó al país con la complicidad de los expresidentes colombianos Álvaro Uribe Vélez e Iván Duque, a quienes Maduro culpa de decenas de presuntos planes para matarlo y muchos más sabotajes carcelarios. El servicio público.
Del mismo modo, dijo que uno de los delincuentes más buscados del país, que opera en el oriente de Caracas, también estaba detrás de uno de los grupos que impulsaban las protestas en Petare, la favela más grande de Venezuela. , en el que EFE constató que miles de personas salieron a las calles para protestar pacíficamente.
contados, dejando un amplio margen de votos que podría cambiar el resultado final. Además, el PUD creó un sitio web en 1981 que publicaba actas que demostraban, según sus opositores, que González Urrutia había ganado las elecciones.
