Cádiz (1973) Redactor y editor especializado en tecnología. Escribiendo profesionalmente desde 2017 para medios de difusión y blogs en español.
El uso de las redes sociales por parte de los menores de edad es un asunto que preocupa a madres y padres. Aunque es habitual que un adolescente emplee aplicaciones como TikTok o WhatsApp, es cierto que hay unas edades definidas para cada una de ellas. En este artículo voy a indicarte cuál es la edad de uso de las aplicaciones de redes sociales más comunes.
Una de las aplicaciones más empleadas, WhatsApp, tenía una edad de uso a partir de 16 años, pero en abril de este 2024 se ha rebajado la edad a los 13 años. Esto se debe a la implantación de la Ley de Servicios Digitales y la Ley de Mercados Digitales.
En esta tabla encontrarás información sobre las edades en las que las apps populares pueden utilizar esta variable en España.
Para los adultos, el uso de determinadas aplicaciones por parte de menores siempre es una preocupación. Pero la verdad es que no siempre actuamos dando buen ejemplo. Es por eso que los adultos debemos educarnos para brindar un apoyo seguro a nuestros hijos. Por otro lado, está claro que nuestro entorno está cada vez más digitalizado y no podemos apartar la mirada, porque no tiene sentido.
Es interesante observar que la mayoría de las aplicaciones. Todas estas aplicaciones lo hacen sin herramientas efectivas o sistemas fiables para evitar su uso antes de la edad recomendada. En caso de que tengas que introducir un programa de cuidado infantil, podrás hacerlo indicando otro año en el que podrás utilizarlo. Es vital que los padres y educadores hablen con los jóvenes sobre los peligros potenciales de compartir información personal en la red, así como de los riesgos de interactuar con desconocidos. Enseñar a los niños a identificar contenido inapropiado o engañoso y a reportar cualquier comportamiento sospechoso puede prevenir situaciones peligrosas.
Además, es importante fomentar un diálogo abierto en el hogar sobre el uso de las redes sociales. Los padres deben esforzarse por entender las plataformas que sus hijos usan y crear un ambiente de confianza donde los menores se sientan cómodos compartiendo sus experiencias en la red. El problema surge cuando los hijos tienen más habilidades que los padres, de ahí la importancia de recibir educación digital por parte de los mayores.
Las redes sociales ofrecen diversas herramientas de control parental que permiten a los adultos monitorear y restringir el acceso a ciertas funciones o contenido. Por ejemplo, plataformas como YouTube ofrecen YouTube Kids, una versión más segura y controlada para niños. Otras aplicaciones como Instagram y Facebook tienen configuraciones de privacidad que pueden limitar quién puede ver el perfil de un usuario menor de edad.
Los padres pueden utilizar aplicaciones de terceros para supervisar la actividad online de sus hijos. Estas herramientas permiten establecer límites de tiempo, bloquear ciertas aplicaciones y recibir alertas sobre actividades sospechosas. Sin embargo, es importante recordar que estas herramientas deben ser complementarias a la comunicación y la educación, no un sustituto de ellas.
En este mundo cada vez más digital, es inevitable que los menores interactúen con las redes sociales. Aunque las plataformas establecen edades mínimas de uso, la responsabilidad de guiar a los jóvenes en el entorno digital recae principalmente en los padres y educadores, es decir, en sus adultos de referencia. Dar las bases para crear un entorno seguro y educar sobre el uso responsable de las redes sociales es esencial para garantizar la seguridad y el bienestar de los menores en las redes. Y sobre todo, hacerles ver que los actos siempre tienen sus consecuencias, ya que Internet no es un mundo paralelo.