Luego de su éxito en París 2024, Yunior Alcántara y Cristian Pinales recibirán incentivos anunciados por el gobierno, obsequios de derechos gubernamentales en su zona, mayor fama y entrevistas, además a ser modelos a seguir para la juventud dominicana.
Pero ahí mismo, entre logros y medallas, comenzaron estos “susurros”, desde diversos ámbitos, para que ambos adhirieran al profesionalismo en poco tiempo. Tenían solo 20 y 22 años, pero ya era un dilema de amor para Yunior y Pinales, quienes con su esfuerzo y sacrificio, por así decirlo, lograron parcialmente el objetivo de los primeros Juegos Olímpicos. los dos.
«Humildemente, tenemos que considerar que nos ponen en la balanza, porque las tentaciones no demoran en dar el siguiente paso, pero veremos qué pasa», dijo Alcántara, quien perdió ante el francés Billal Bennana en la lucha por la medalla de oro.
Agregó que no sé cuál será el plan de la Federación, si entienden que seguimos entregando medallas al país en los campeonatos internacionales. competencias.
«Vamos a esperar qué pasa, la Federación Dominicana de Boxeo de ¿Qué tenemos a nuestro favor y qué será lo mejor para nosotros? Tenemos que abordar ciertos puntos, ya sea que nos quedemos para otro Ciclo olímpico o dar el gran paso para convertir las cosas en boxeador”, agregó Alcántara, oriundo de Higuey, durante una visita que ambos realizaron a la redacción del Listín Diario.
Con el ánimo. del gobierno, Alcántara se comprometió a construir una casa, a nombre de Rafael Duluc (Cholitiìn), senador electo de Altagracia, junto con el alcalde.
Así que el senador saliente también le hizo un regalo en efectivo . También prometió otros obsequios a ambos peleadores. “Tuve una buena ronda de entrevistas y no estaré allí en unos días.
“Pero estoy seguro de que me esperan cosas buenas”, dijo el boxeador de 81 años. kg.
Mientras Pinales tiene su propia casa, Yunior vive en una casa alquilada. En el primer caso, su casa tenía que estar completamente amueblada.
Para Alcántara, eso fue frustrante. Al escuchar una decisión desfavorable durante el partido contra Bennana, entendió que había ganado el partido pero ese no fue el caso. “Obviamente esto es lo que Dios tenía reservado para mí y lo aceptó”, agregó el peleador.
Yunior incluso dijo que cuando le propinó un golpe a su oponente en el último round lo hizo caer al suelo. lona, mirando al árbitro, porque entendió que el conteo tenía que empezar, me dije que fuera serio y no le dirás, eso casi automáticamente daba que gana
«Me sentí superior en la En el tercer round, para mí lo gané, tengo las herramientas para lograr la medalla de oro y verlo en estos segundos todo desaparece, desmotiva a todos”, enfatizó.
Los dos peleadores vienen de ahí. clubes de boxeo pobres, por ejemplo, hierros viejos y campanas que suenan cada vez que lo golpean, guantes ciertamente inútiles, evidencia del club al que pertenecen.
Yunior y Pinales son dos de los ejemplos de estos atletas, a través del sacrificio, lograron sus sueños, en su caso una medalla olímpica. Ambos boxeadores fueron debidamente invitados a la ceremonia de toma de posesión por el presidente Luis Abinader este viernes. “Nos dieron las coordenadas de que teníamos que asistir de blanco y se coordinó todo.
