La República Dominicana enfrenta el desafío de una reforma tributaria integral bien diseñada destinada a mejorar los ingresos como una acción clave para la convergencia económica con los países avanzados, reduciendo la desigualdad y mejorando la sostenibilidad fiscal. Los ojos del mundo están puestos en nosotros anticipando lo que sucederá con este problema.
Desde que el presidente Luis Abinader anunció la reforma tributaria poco después de las elecciones, los organismos multilaterales han apoyado incondicionalmente esta iniciativa, confirmando al público posición. en los medios. Decidí mirar los enfoques centrales de tres principales organismos internacionales relacionados con la economía y el desarrollo de los países.
Me refiero al Banco Mundial, la Autoridad de Desarrollo del Banco Interamericano (BID) y el Banco Internacional. Fondo Monetario (FMI). Su informe de presentación, que tiene carácter oficial, define las expectativas económicas y financieras de estos organismos durante el nuevo período de gobierno.
Palabras clave que componen los campos semánticos del Banco Mundial, BID y El FMI sobre la reforma tributaria en República Dominicana son: crecimiento del ingreso, reforma integral, convergencia y reducción de la desigualdad, necesidad inmediata de inversión en servicios, infraestructura y capital humano; Frecuentes déficits presupuestarios, aumento de la deuda pública y mejoras en las calificaciones de riesgo país.
Ahora veamos cómo se desempeña cada organismo multilateral y luego tengamos ideas sobre el marco de acción del Gobierno. :
Banco Mundial (17 de junio):
Banco Interamericano de Desarrollo (BID) (26 de junio):
Fondo Monetario (FMI) ) (24 de junio):
La guinda del pastel
Vale la pena señalar que tenemos una declaración oficial al final del viaje El FMI acaba de visitar esto país para equilibrar el gasto en la economía. El incidente ocurrió el 24 de julio y se resume de la siguiente manera:
La postura de los organismos internacionales es más clara que la del país. El Banco Mundial, el BID y el FMI coinciden en la necesidad urgente de una reforma tributaria integral para no sólo aumentar los ingresos sino también mejorar la eficiencia del gasto público, reducir la evasión fiscal y eliminar exenciones innecesarias. Estas medidas son importantes para garantizar la sostenibilidad fiscal y la inversión en infraestructura y capital humano, que son esenciales para el crecimiento a largo plazo.
El gobierno de Dominica enfrenta el desafío de diseñar e implementar una reforma que cumpla con estas expectativas y fortalece la economía del país sin sacrificar el desarrollo social.
La implementación de estas recomendaciones será decisiva para lograr una calificación de grado de inversión y garantizar un futuro más próspero y equitativo para todos los dominicanos. La espera por la respuesta del Gobierno no será larga, pero el proceso será complejo y requerirá un enfoque estratégico y una implementación precisa.