La intención de reformar la Constitución y reducir el número de legisladores en la Asamblea Nacional «parece» positiva. Con la crisis económica que atraviesa el país, cada propuesta para “ahorrar” un poco de dinero nos motiva a apoyar esta iniciativa.
Sin embargo, la esperanza de CASTRATES quiere ahorrarle a la gente 800 o mil millones de pesos. No me parece bien. Hay dictamen para destituir a 53 delegados porque es beneficioso. Pero aumentar el número de delegados es legítimo. ¿Por qué?
No creo que el recorte sería favorable porque privaría a los votantes del derecho a elegir a 53 legisladores, pero lo sería. dado el «dedo» de la dirección del partido el derecho de seleccionar 20 «delegados» nacionales, más 20 adicionales del Parlacen. Parece que esta idea pretende privar a los electores de la oportunidad de elegir a sus representantes. Me opongo.
Otra sugerencia que no me gusta es la unificación electoral, también basada en la «economía de recursos». Me uno a las voces que abogan por elecciones municipales distintas de las presidenciales. Creo que deberían tener dos años de diferencia. Esto daría a los votantes el poder de elegir el gobierno de su ciudad de forma más independiente. En estas elecciones municipales agregaré que se incluirán los votos para el gobernador provincial.
Esto le dará mayor legitimidad a este funcionario, quien actualmente es designado con el dedo del presidente en ejercicio. Ahora que el Presidente quiere REFORMAR «quitarle» parte del poder al ejecutivo, sería mejor que le quitara el derecho a elegir elegir al gobernador y dejara este cargo en manos del soberano, el día de las elecciones municipales. Aunque creo que las reformas son inútiles en este momento, si todavía se implementan, aquí están mis propuestas: ELECCIÓN SEPARADA, GOBERNADOR VOTADO POPULARMENTE Y LEGISLADORES SIN REDUCCIONES.
