En el ámbito de la tributación y la justicia social, República Dominicana se encuentra ante un momento decisivo. El proyecto de ley propone abolir el impuesto sobre sucesiones como medida importante en el ámbito económico y social. Este impuesto, que grava la transferencia de propiedad por herencia a una tasa del 3%, ha sido objeto de debate sobre su impacto en los ciudadanos y su papel en el sistema tributario del país.
Este proyecto de ley se ajusta a un perspectiva más amplia. visión de responsabilidad social y solidaridad. La carga que el impuesto a la herencia impone a muchos herederos, especialmente aquellos con recursos limitados, sugiere la necesidad de reconsiderar su enfoque.
Abolir el impuesto a la herencia no sólo sirve como una medida de alivio para los contribuyentes sino que también demuestra un compromiso con equidad, permitiendo a los herederos disfrutar de todos los beneficios de su herencia legal sin la carga fiscal adicional durante tiempos de duelo y transición.
En general, la abolición del impuesto a la herencia representa un progreso en términos de justicia social. . Esto demuestra un fuerte compromiso con la búsqueda de soluciones que beneficien a las poblaciones más vulnerables o aquellas que, por falta de recursos u otras razones, no pueden movilizar capital suficiente para pagar sus aportes. Cabe destacar que esta iniciativa se ha implementado en otros países, como España, donde diversas comunidades autónomas como Murcia, Cantabria, Andalucía, entre otras, han decidido reducir o eliminar por completo el importe correspondiente al impuesto de sucesiones.
De ser efectivo, este proyecto de ley pretende modificar la ley 2569-50 relativa a los impuestos sobre sucesiones y donaciones. La donación implicará cambios y ajustes en el proceso sucesorio. En cuanto a la abolición del impuesto a la herencia, permitirá que todos los contribuyentes se beneficien de la herencia dejada por sus familiares. Según datos compartidos por el Senado, actualmente hay más de 75.000 familias en República Dominicana afectadas, que no pueden recibir los bienes de familiares fallecidos por no contar con recursos suficientes para pagarles los correspondientes impuestos a la herencia. . En resumen, la abolición del impuesto a la herencia fue vista como una medida para fortalecer el tejido social de la República Dominicana. Este es un llamado a un equilibrio cuidadoso. Si bien es ciertamente significativo, el impacto financiero de esta medida debe sopesarse con los beneficios sociales.
**El autor es socio de Tax and Legal Services.