SAN DOMINGO.- El 15 de agosto se celebra la fiesta de la Asunción de la Virgen María y el 102 aniversario de la coronación canónica de la Virgen de la Altagracia como Soberana y Protectora.
Santiago estuvo presente a través de una delegación de 52 personas que asistieron a la Misa Solemne celebrada en la Basílica de Higüey a las 10 horas del jueves 15 de esta semana, presidida por Monseñor Jesús Castro, obispo de esta diócesis, y concelebrado por Monseñor José Dolores Grullón, quien organizó esta peregrinación desde Santiago y animó a fomentar la consagración a nuestra Madre.
La ciudad de Santiago ha participado activamente en esta romería. celebración, representada por una delegación de 52 personas que asistieron a la Eucaristía, donde se llevó a cabo una consagración especial, en la que participaron 25 mujeres de Altagracia comprometiéndose a dedicar su vida a la Virgen María. Este acto simboliza la profunda devoción y conexión personal de los creyentes con nuestra Madre y Protectora, así como su ferviente deseo de ser instrumentos de paz y amor en sus comunidades.
Una de las cosas más importantes. del Jubileo es la entrega de la imagen número 79 de la Virgen, que iniciará su recorrido por los hogares santiagueros y traerá muchas bendiciones.
Cada bendición recibida durante esta peregrinación ayudará a tejer una historia de amor , esperanza y protección, guiadas por la Virgen de la Altagracia.
Esta celebración del 15 de agosto ha traído un nuevo impulso para seguir conectando y fortaleciendo la fe, bajo la mirada maternal de la Virgen María
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En este gran día, 25 mujeres altagracianas que han sido consagradas y recibieron la imagen número 79, peregrinarán a hogares de Santiago. Esta maravillosa peregrinación está llena de bendiciones.
La consagración del Inmaculado Corazón de María a la advocación de la Virgen de Altagracia y el regreso a casa de las vírgenes peregrinas es un proyecto del Comité Nacional Unidos de Altagracia y la Asociación de Mujeres de Altagracia.
Juntos luchan para que cada parroquia del país tenga una Virgen de Altagracia en cada hogar. La familia dominicana tuvo niños y adolescentes y sus testimonios quedaron registrados en un diario. enviado con fotos.