La activista María Jesús Pola (Susi Pola), miembro del Foro Feminista Magaly Pineda, denuncia que, aunque los índices de genocidio de mujeres en República Dominicana son altos, la Se ha agotado la implementación de métodos y procedimientos. con quienes en el sistema penal minimizan las conductas delictivas como consecuencia de la violencia de género por circunstancias externas.
Asegura que no hay manera de erradicar virtualmente La ideología siempre culpa a las mujeres por los problemas socio- barreras culturales, moralismo, creencias sexistas y clasistas que aquí prevalecen.
Desde hace 40 años, Susi Pola mantiene un discurso que, según ella, a veces dice lo mismo sobre este fenómeno, y esto, por Su Excelencia, hay muchas razones para pensar que la sociedad dominicana está empeorando, pero dijo que no le queda más remedio que seguir luchando por la causa social.
Podemos leer: Denuncian indiferencia del gobierno hacia el deterioro mental de la salud
Según el dirigente CIDH, de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, expresó hace muchos años que quienes agreden a las mujeres en el contexto de pareja y/o familia, así como sus hijos e hijas, se encuentran entre los tipos de delincuentes más peligrosos, por su frecuente acoso y agresión a sus víctimas, así como por su carácter peligroso.
Sus estudios, dijo , muestran que una proporción significativa de mujeres son víctimas de violencia de género, terminando asesinadas por sus agresores después de la separación y a menudo beneficiándose de medidas de protección preventiva. De hecho, entre el 50% y el 90% de los feminicidios ocurren entre el momento de la denuncia y la separación y en los 12 meses posteriores.
«Casos terribles ocurren. En el mismo sistema penal de violencia de género», actores Quienes violan los derechos de las víctimas, vuelven a ser sus víctimas, los policías, los fiscales cuando despiden a una víctima porque tiene un estereotipo de mujer pobre o de mujer o cualquier otro estereotipo”, dijo -declaró.
Susi Pola enfatizó que es desgarrador ver jueces en nuestro país anular casos cuando consideran comprensible al agresor y justifican el acto, lo que representa una cultura profunda en este sentido. «Básicamente somos una sociedad corrupta, porque también vemos abogados negociando e ignorando el fenómeno. «La gente es corrupta cuando paga a la policía para evitar pagar multas de tránsito», agregó. Esos quienes prestan servicios violan los derechos de las víctimas, porque según ellos, la gente hace lo mismo, aunque las estadísticas muestran que la violencia de género representa la mayoría de los casos que llegan a la justicia, más que los robos y otros incidentes.
El papel de la familia y la prensa, con su papel sensacionalista y superficial, no escapan a los problemas sociales, según el dirigente, simplemente por el bien de vender y recibir atención resalta más el carácter sangriento de
“Esto convirtió los juicios de las víctimas en una pesadilla y al final las abandonaron”, declaró siempre la activista defensora de los derechos de las mujeres y los niños.