De los Santos ofreció estas declaraciones en respuesta a las discusiones que ha causado uno de los puntos básicos de la iniciativa presentada por el Poder Ejecutivo, que plantea disminuir a 137 la actual cifra de 190.
Aunque la dirección del gobernante Partido Revolucionario Moderno (PRM) apoyó la propuesta del dignatario Abinader, legisladores de esa fuerza política rechazan la idea de suprimir 50 plazas y plantean rebajar solo 15.
Pese a los diferentes puntos de vista sobre este tema y otros, De los Santos estimó que no afectará el conocimiento y estudio del documento.
«Cuando hay una propuesta y hay una contrapropuesta, eso significa que existe la posibilidad de llegar a un consenso», puntualizó.
El senador expresó confianza en que la comisión bicameral encargada de elaborar un informe sobre el proyecto tenga la capacidad de lograr un acuerdo entre los congresistas.
Aunque el PRM cuenta con una amplia mayoría en la Cámara de Diputados y el Senado, que le permite sancionar cualquier proyecto, el vocero de la Fuerza del Pueblo (FP), Omar Fernández, no descartó que su agrupación presente un informe para demostrar que los cambios a la Carta Magna son innecesarios.
De la misma forma, el diputado Danilo Díaz, del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) y miembro de la comisión bicameral, manifestó que aunque la oposición es minoría, se mantendrá vigilante a los debates para evitar “trucos” a última hora, publicó Diario Libre.
Al proyecto de reforma constitucional se resisten otras fuerzas políticas que la consideran superflua y estiman que la actual administración debe centrar su trabajo en la búsqueda de soluciones a problemas como la inseguridad ciudadana, la inflación y el desempleo.
El Partido Revolucionario Dominicano (PRD) indicó que la Constitución actual establece de manera muy clara que la elección presidencial contempla «dos períodos consecutivos y nunca jamás”, por lo tanto, señaló, el cambio propuesto no se fundamenta.
El gobernante Abinader, en cambio, insiste en la necesidad de ponerle un “candado” para que ningún presidente pueda gobernar más de dos períodos sucesivos como ocurrió en el pasado.
También busca la independencia del Ministerio Público, unificar las elecciones municipales, congresuales y presidenciales, y variar la forma de designar al procurador general de la República.