El líder político Carlos Amarante Baret anunció este domingo el nacimiento de una nueva organización política que, según él, luchará por preservar, proteger y unir al pueblo dominicano en su búsqueda de la felicidad colectiva.
Explicó que en América Latina «la desconfianza en los partidos la expresa el 77,2% de la población, según el Latinobarómentro 2023» y que en este país «la encuesta fue publicada anunciada en agosto de este año por el Ministerio de Economía y Planificación que el 75.7% de los dominicanos no confía en los partidos políticos.»
Aseguró que están surgiendo nuevas organizaciones políticas en un contexto nacional dominado por el deterioro de servicios públicos como salud, educación y La seguridad ciudadana y una ola de reformas innecesarias impulsadas por el gobierno, el punto de inflexión que trajo la paz relativa para el pueblo es la reforma fiscal destinada a sacar 70 mil millones de los bolsillos de la clase media, los trabajadores y los pobres, esta cantidad tenía que ser. será retirada anoche por el gobierno. Presidente Luis Abinader.
No hay un solo sector independiente en el país que haya apoyado esta reforma, que nació y murió en flor, como debe ser.» Dijo y agregó: «Esta victoria colectiva es un ejemplo que el gobierno y sus dirigentes deben seguir, porque hay derechos sagrados que nunca deben ser tocados, como lo demuestra la abrumadora respuesta pública a ellos.»
Amarante enfatizó que el entorno internacional no pudo. ser peor para el país, ya que «la estancada guerra entre Rusia y Ucrania lo invadieron, la guerra en Medio Oriente donde los terroristas Hamás, el Hezbollah del Líbano, ambos respaldados por Irán, y el criminal Netanyahu de Israel, amenazan con iniciar una guerra mundial que podría destruir la humanidad». prueba de existencia. Esta realidad crea un escenario volátil y muy peligroso para un país pequeño como el nuestro. «
También se menciona la pregunta de Haití, que dice: “No podemos dejar de mencionar el caso de nuestro vecino Haití, abandonado por la comunidad internacional, que nos exige sacrificios que ya no podemos soportar, mientras los Estados Unidos Los Estados y Francia eluden su responsabilidad histórica por la desgracia de nuestros hermanos haitianos, y por parte de Canadá, se niegan a apoyar a este sufrido país con recursos económicos y dinero para su desarrollo. “Hemos ayudado demasiado a Haití, es hora de que alguien más se haga cargo. sobre la responsabilidad hagan su parte”.