Jerusalén (EFE).- Cuatro soldados murieron y otros siete resultaron “gravemente heridos” en el ataque perpetrado anoche por el grupo chií libanés Huzbulá contra un base israelí en el sur de la localidad de Haifa.
“Ayer (domingo), un UAV lanzado por la organización terrorista Hizbulá golpeó una base militar adyacente a Binyamina”, según ha informado este lunes el Ejército israelí en un comunicado, y “cuatro soldados (…) murieron en el incidente y otros siete resultaron gravemente heridos”.
El Ejército publicó hoy los nombres de fallecidos, tras notificar a sus familias. Los cuatro tenían 19 años y estaban en entrenamiento de infantería.
En el ataque, perpetrado en el norte de Israel, se produjo la tarde del domingo con dos drones disparados por Hizbulá contra el sur de Haifa sin que sonaran las alarmas previamente.
El Ejército logró interceptar uno de ellos, pero no el segundo que impactó contra la base militar de Golani.
El ataque de Hizbulá “ha causado dolor”
El jefe del Estado Mayor del Ejército israelí, Herzi Halevi, reconoció que el ataque de Hizbulá “es difícil y ha causado resultados dolorosos”.
“Estamos en guerra, y un ataque a una base de entrenamiento en el frente interno es difícil y los resultados son dolorosos. Abracen a las familias en duelo, acompañen a los heridos y fortalezcan a los comandantes y soldados”, trasladó Halevi a los afectados en una visita que realizó anoche a la brigada.
Con este comunicado, el Ejército desmiente los rumores que se difundieron ayer por canales árabes de que Halevi había perdido la vida en este ataque perpetrado por la milicia chií.
Por su parte, el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, que también visitó la base, aseguró que aprenderán las lecciones del ataque de ayer para evitar que vuelva a producirse un escenario así.
“Ante la amenaza de los vehículos aéreos no tripulados, estamos concentrando un esfuerzo nacional y estamos comprometidos en desarrollar soluciones que ayudarán a lidiar con la amenaza”, dijo.
Hizbulá reivindica el ataque
Hizbulá reivindicó el ataque el domingo, justificando que esta acción forma parte de una serie de operaciones, en respuesta a los “ataques sionistas, particularmente en los barrios de Al Nwaireh y Al Basta, en la capital Beirut y otras regiones libanesas”.
“La Resistencia Islámica llevó a cabo una operación en la noche del domingo de 13 de octubre, lanzando un grupo de drones de asalto contra un campo de entrenamiento de la Brigada Golani en Binyamina, al sur de Haifa”, afirmó Hizbulá en un comunicado.
El ataque de Hizbulá llega mientras Israel mantiene su ofensiva en el sur de Líbano.
En las últimas horas, el Ejército israelí asegura haber atacado unos “200 objetivos terroristas” de la milicia chií, entre ellos puestos de lanzamiento de misiles antitanque y almacenes de armas que también contenían lanzacohetes y munición.
“Los soldados de nuestro Ejército continúan con sus incursiones limitadas, localizadas y dirigidas contra objetivos terroristas de Hizbulá en el sur del Líbano”, informó un comunicado castrense.
Asimismo señaló que docenas de miembros del grupo libanés perdieron la vida en combates “cuerpo a cuerpo” contra sus soldados y en otros ataques aéreos.
Mientras, el portavoz del Ejército israelí en árabe, Avichay Adraee, difundía nuevas órdenes de evacuación para unas 20 localidades del sur de Líbano, lo que eleva a más de 60 el total en los últimos tres días.